Ahorro

Así es como pueden empezar a ahorrar los jóvenes para su jubilación

El salario medio de los que tienen entre 25 y 29 años no llega a los 16.000 euros

El problema llega cuando dejamos de tener control sobre nuestras deudas | Fotografía de archivo
El problema llega cuando dejamos de tener control sobre nuestras deudas | Fotografía de archivolarazon

La vida cada vez es más cara y la presión inflacionista está haciendo que el poder adquisitivo de miles de ciudadanos penda de un hilo. Por tanto, no es de extrañar que los bolsillos de las familias españolas se hayan visto resentidos ante la situación económica actual que está atravesando el país. No obstante, pese a esta problemática, tener ahorros se vuelve fundamental para hacer frente a imprevistos a corto plazo, poder desarrollar proyectos futuros o incluso para la jubilación. En este contexto, desde el blog de BBVA explican cómo es conveniente que aquellos más jóvenes, aunque tengan ingresos bajos, realicen “pequeños sacrificios recurrentes” y sean constantes para así obtener unos resultados a largo plazo “óptimos”.

No obstante, querer y poder ahorrar no siempre es fácil, sobre todo durante los primeros años de la vida activa de una persona, ya que se encuentra con muchos gastos como la vivienda, seguir formándose e incluso disfrutar de momentos de ocio. Sumado a esto, los salarios en España son más bajos en relación a los de la media de otros países europeos, ya que en 2019 era de 23.645 euros, siendo 18.000 euros el salario más habitual. Sin embargo, esta situación es aún peor para los jóvenes, ya que el salario medio de los que tienen entre 25 y 29 años no llega a los 16.000 euros, y de los de 30 a 34 años de 19.340. Asimismo, el paro entre los menores de 30 años, antes de la pandemia superaba el 32%.

Por tanto, aunque ahorrar implique un sacrificio, siempre se puede reservar una cuantía por pequeña que sea, mientras se tenga un empleo estable e ingresos regulares, así como unos gastos esenciales normales. “No se trata de hacer grandes acciones, sino de pequeños sacrificios para encontrar esa “porción” de nuestros ingresos mensuales a destinar recurrentemente al ahorro”, explican desde esta entidad. En este aspecto, se pueden reducir ciertos gastos no esenciales sin renunciar a ellos como buscar fechas más económicas para unas vacaciones, quitarse el postre al salir a cenar fuera de casa o incluso tomar el café diario en casa en vez de en una cafetería.

Asimismo, es importante que sepamos ordenar nuestra economía personal para ser conscientes de los ingresos que recibimos y los gastos que se realizan en diferentes ámbitos. En este aspecto, muchas personas actúan de la siguiente manera:

  • Primero recibir los ingresos.
  • Después gastar tanto en necesidades básicas (vivienda, comida, suministros...) como en ocio (salir con amigos, restauración, hobbies...).
  • Y por último, el excedente que sobra se destina al ahorro e inversión.

Sin embargo, desde BBVA explican que la fórmula a seguir debería ser la siguiente:

  • Primero recibir los ingresos.
  • Después gastar en necesidades básicas como vivienda, comida o suministros, entre otros.
  • Realizar un gasto para invertir en el futuro profesional en formación como másters o idiomas.
  • Ahorrar una cantidad constante mínima cada mes, aunque si hay épocas que se puede ahorrar más , este deberá incrementarse. Esta cuantía irá primero a un fondo para imprevistos y después para distintos objetivos de ahorro a corto, medio y largo plazo.
  • Y finalmente, el excedente que sobre, se destinará a gastos superfluos como salidas con amigos o hobbies.