Crisis

Medios rusos afines a Putin reconocen el hundimiento de la economía: “La destrucción de Rusia está en marcha”

Según las cifras de Rosstat, el “INE” del Kremlim, el PIB se puede hundir un 5,4% a final del año, la producción industrial un -7,2% y el comercio minorista un -6,1%

Trabajadores municipales colocan una bandera rusa en una tienda estatal en Moscú
Trabajadores municipales colocan una bandera rusa en una tienda estatal en MoscúAlexander ZemlianichenkoAgencia AP

Que la situación económica de Rusia se hunde no es solo un comentario de los gobiernos occidentales para tocar la moral de los ciudadanos. No, es una realidad sustentada en cifras reales que los propios medios más próximos a Putin refrendan con datos oficiales.

Es el caso deSvobodnaya Press, grupo ruso de medios que informaba hoy en un artículo en su edición digital que aunque la venta de petróleo y gas, así como otras materias primas, sigue respaldando el presupuesto estatal de Rusia, “todas las demás fuentes de ingresos muestran una fuerte caída. La industria manufacturera está en una profunda crisis, el comercio también: la gente no tiene dinero. De hecho, toda la economía de la Federación Rusa se está derrumbando, y solo reformas rápidas y radicales asociadas con un cambio completo de prioridades, principalmente sociopolíticas, pueden detener este proceso”.

Estamos refiriéndonos a un medio que, por poner un ejemplo, llama a las fuerzas armadas ucranianas “ukrowermacht”, en referencia al ejército de la Alemania nazi, y que no se sale de la consigna oficial de llamar a la invasión de Ucrania “operación especial” para desnazificar el país. Por lo tanto, poco sospechoso de mostrar una actitud crítica contra el Gobierno de Putin.

Sin embargo, las cifras macroeconómicas son alarmantes: según datos de octubre de 2022, los ingresos no petroleros y de gas del presupuesto federal cayeron 1,12 billones de rublos, es decir, un -20,1% respecto de octubre de 2021. “Pero hay otros datos aún más terribles: El crecimiento económico del país, que ascendió a solo un 0,4% en la primera mitad del año, según la previsión del Ministerio de Desarrollo Económico, se convertirá en una caída en la segunda mitad del año del 5,4%. El crecimiento industrial del 0,9% en enero-agosto será reemplazado, según la previsión del Ministerio de Desarrollo Económico, por una caída anual del -1,8%, es decir, en los últimos cuatro meses del año la reducción de la producción industrial se situará en un -7,2%”.

Pero no solo estaríamos hablando de macroeconomía, sino también de micro, de la facturación del comercio minorista, por ejemplo, directamente relacionada con el consumo real de los ciudadanos, que sufrirá una caída a final de año del -6,1% anual. Si se extrapolan los datos al periodo septiembre-diciembre, se pronostica una reducción del consumo de la población rusa en otro 8,5%, según Mikhail Delyagin , vicepresidente del Comité de Política Económica de la Duma Estatal.

Y para que no quepa lugar a dudas sobre si los datos son una manipulación occidental o inventados por los enemigos del Kremlim, la fuente es Rosstat, el Servicio Estadísticas del Estado Federal, un órgano ejecutivo federal responsable, según la propia web del Gobierno ruso, “de desarrollar la política gubernamental y la regulación legal de las estadísticas oficiales; la recopilación de información estadística oficial sobre los procesos sociales, económicos, demográficos, ambientales y otros procesos sociales en la Federación Rusa; y supervisión de las estadísticas oficiales en la forma y los casos previstos por la legislación de la Federación Rusa”.

Así que la fuente es oficial a más no poder y, si algo cabría pensar, es que sería posible que se queden cortas e intente “barrer para casa” antes que hinchadas.

Por eso, siguiendo con la misma fuente oficial, la recaudación por el impuesto sobre la renta cayó un 26,3%. La recaudación del IVA “interno” cayó, según Svobodnaya Press, un 39%. “Los indicadores no fiscales también hacen que uno sude frío. La ingeniería mecánica y otras industrias no primarias muestran un hundimiento de entre el 20 y el 45%, el consumo de metales en el país ya cayó un 21%, y esto es desde principios de año hasta septiembre. Para el Año Nuevo será aún peor”. Otro tanto se puede decir del mercado inmobiliario: la demanda de nuevas viviendas disminuyó en más del 40%.

Asimismo, según la empresa de investigación Frank RG, el mercado de préstamos al consumo sin garantía volvió a crecer en octubre, con un 7,8% más de préstamos emitidos que en septiembre, con lo que el aumento de la deuda familiar es evidente.

Llama la atención cómo termina el artículo, con un tinte incluso racista, resaltando que la situación no se está dando en cualquier país, no en cualquier economía, no, sino “en el país más rico del mundo”, no en “Burkina Faso, un país pobre con nativos holgazanes”. “Tenemos todo: energía, metales, alimentos, y cualquier tipo de materia prima. Hay una población bastante competente y muy trabajadora que quiere trabajar. Y no solo por ellos mismos y por su país, sino también por su futuro y el futuro de sus hijos”.

Carga sin embargo contra la burocracia y la oligarquía del país, “una manada insaciable que solo ven en Rusia un comedero” y les tilda de “traidores, enemigos del pueblo [...]. La destrucción de Rusia está en marcha, se acelera cada mes. De momento, la situación es bastante reversible, aunque ahora es peor que en primavera [...] En realidad, ha llegado la hora de la verdad. O nosotros o ellos. Una cuestión banal de supervivencia, tanto para nosotros como para nuestros hijos. Mañana puede ser demasiado tarde”.