¿Qué transición ecológica? El gas reina

¿Cuál ha sido la tecnología de generación ganadora en 2022 en España? Según los datos preliminares de Red Eléctrica, son los ciclos combinados de gas natural, responsables del 24,7% de toda la electricidad generada. Le sigue la eólica, con el 22,2% y luego la nuclear.

¿Qué implica ese liderazgo de los ciclos combinados? Que España ha emitido CO2 por un tubo. Y es que una central de ciclo combinado de gas emite unas 0,4 toneladas de CO2 por cada MWh de electricidad que produce, emisión por la que tiene que pagar derechos y que encarece aún más el precio.

En 2017, el gas generó 36.000 gigavatios hora, con la nuclear como líder y el carbón produciendo casi tantos GWh como la eólica. En 2019, las cosas dan un vuelco al apagarse las térmicas y la nuclear y los ciclos casi empataron como líderes de generación (55.800 GWh por 55.200 GWh).

¿Quién ha llenado el hueco del carbón? Desde 2017, la eólica ha aumentado un 27,7% su generación (47.907 GWh a 61.176 GWh); la fotovoltaica, un 231% (8.398 GWh a 27.864 GWh); la nuclear, un 0,8% (55.539 GWh a 55.984 GWh y los ciclos de gas, un 84%, de 37.066 GWh a 68.138).

Quemamos más gas que nunca, emitimos CO2 sin miramientos y ponemos fin a la nuclear porque genera residuos que pueden ser tratados sin riesgo y que ya están siendo enterrados para la eternidad en Finlandia, en un almacenamiento llamado Onkalo, cueva en finés. Allí, la radiación estará rodeada de arcilla de bentonita dentro de un pozo perforado en granito a 420 metros. ¿Podrían soportar estas barreras una nueva era glacial? Ese lecho es una de las formaciones geológicas más antiguas de Europa, con 1,8 millones de años.

La realidad es que España ha puesto fin en 2022 a 13 años “verdes” en los que la primera tecnología de generación no emitía CO2: la nuclear, solo destronada en 2021 por la eólica. ¿Era esto la transición ecológica?

¿Qué pasará cuando se cierren las nucleares? ¿Qué tecnología respaldará el sistema? Los expertos lo tienen claro: los ciclos de gas a un precio inestable y contaminante. ¿Qué hacen en el resto del mundo? Apostar por levantar más nuclear y alargar la vida de sus centrales, de China a Rusia, EE UU, Francia y hasta Suecia. Otro «boom nuclear.