Tipos de interés

El Banco Central Europeo prolongará otros nueve meses el periodo de vigencia de la compra de deuda

Alemania quiere que el BCE relaje su política monetaria

Mario Drghi en la reunión del G20 y los gobernadores de los bancos centrales en Wasinghton
Mario Drghi en la reunión del G20 y los gobernadores de los bancos centrales en Wasinghtonlarazon

Muchos ahorristas y buena parte de la esfera financiera alemana no ven el momento de que aumenten los tipos de interés y de que el Banco Central Europeo (BCE) relaje su política monetaria. Tendrán que seguir esperando. Los responsables de la entidad quieren prolongar otros nueve meses el periodo de vigencia de las compras de deuda, hasta octubre de 2018, según dijeron ayer fuentes próximas al BCE. En el punto de mira, la reunión del próximo 26 de octubre en la que se preven nuevas pistas sobre los pasos que pueda dar el organismo en lo que se refiere a su programa de compras de activos.

Según esas fuentes, habría un consenso en el seno de la institución respecto de la necesidad de que el importe se reduzca significativamente de los actuales 60.000 millones de euros, a cifras que oscilarían entre los 25.000 y los 40.000 millones, aunque por el momento no se habría realizado una propuesta formal. Hasta entonces, una de las principales tareas será conciliar el mayor crecimiento de la zona euro de la última década con una tasa de

inflación que posiblemente será inferior al objetivo oficial del 2%.

El siguiente paso todavía está por discutir, pero hay un consenso de que debería reflejar tanto la necesidad de recortar los estímulos ante el fuerte crecimiento económico, como el compromiso de continuar con la política acomodaticia durante un periodo prolongado, dijeron las fuentes. Es probable que el mayor tema por discutir es si habría que mantener abierto el programa, dando al BCE la flexibilidad de ampliarlo una vez más, o remitir una señal firme sobre su finalización.

Mientras Alemania quiere que el BCE señale su intención de poner fin a las compras, los partidarios de una política monetaria relajada quieren, al menos, el mismo tipo de flexibilidad que el banco tiene ahora para extender las compras en caso de que las perspectivas económicas empeoren. “Decidir si será un plazo abierto o cerrado va ser el mayor debate” expresó una de las fuentes cercanas al Consejo Director del BCE. "Puedo ver un compromiso de que lo mantendremos como está ahora, con una fecha límite que nos permita extender el programa si es necesario", añadió.

Una vez que el organismo exprese su intención de mantener las tasas de interés en mínimos históricos hasta mucho después del final de las compras de bonos, una prórroga del programa aplaza efectivamente la perspectiva del ajuste monetario.

Justo ayer, el presidente del BCE, Mario Draghi, afirmó que las tasas de interés seguirán en los extraordinarios niveles bajos de la actualidad "bien pasado"el momento en que concluya el programa multimillonario de inyección de liquidez a través de la compra de deuda.