Ley de Emprendedores
El Gobierno ultima la ley de emprendedores para llegar al viernes
La Ley de Emprendedores, el proyecto estrella del Gobierno de Mariano Rajoy, pasó por la Comisión Delegada de Asuntos Económicos el jueves 9, y la semana pasada entró en la comisión de subsecretarios.
En medios gubernamentales se contaba incluso con que el proyecto de ley pudiese ir el viernes pasado al Consejo de Ministros. Su espacio lo rellenó, finalmente, la reforma educativa, pero lo cierto es que en el fondo también ha pesado el debate que ha habido dentro del Ejecutivo por el alcance de la nueva norma. Es un texto «complicado, muy largo y complejo, y difícil de pulir», explican desde el equipo económico.
En cualquier caso, según confirmaron fuentes solventes, todo está listo para que el texto sea aprobado este próximo viernes en la reunión del Gabinete ministerial.
Hacienda tiene la llave
El principal motivo del retraso, y el que ha centrado más tiempo del debate, ha sido el alcance de los incentivos fiscales. Hacienda se queda siempre un paso atrás cuando por medio hay gasto. Es habitual que se quejen de ello en todos los ministerios. La llave de la caja la tiene el Ministerio de Hacienda, como también son los principales responsables de rendir cuentas sobre la consolidación fiscal y la reducción del déficit público.
Además, ha costado mucho trabajo definir la figura del emprendedor. Dentro del Gobierno hay quien ha defendido que los apoyos a la inversión deberían tener un alcance más general, es decir, que el Ejecutivo debía aprovechar esta reforma estructural para enviar un mensaje claro y rotundo de su apoyo a todo proyecto de inversión en España, nacional o internacional. Impulsando, para ello, medidas fiscales, con refuerzo del crédito o limitando la burocracia. Sin que la restricción sea si el empresario no supera una edad o cumple un determinado patrón de requisitos.
La Ley de Emprendedores ha traído consigo el debate sobre una nueva Ley de Concurso para personas físicas.
Hasta ahora esta prerrogativa es sólo para las sociedades anónimas. Y la discusión se ha abierto a si conviene que se haga extensiva a empresarios individuales, pequeñas y medianas empresas (pymes) y autónomos, para evitar así que un fracaso convierta al empresario en un «cadáver viviente».
Medidas fiscales
El pasado día 26, en el Consejo de Ministros en el que el Gobierno revisó las previsiones macroeconómicas y presentó el Programa de Estabilidad 2013-2016 y el Plan Nacional de Reformas, anticiparon que la Ley de Apoyo al Emprendedor y su internacionalización incluiría medidas fiscales, como el régimen especial en el IVA, deducciones por reinversión de beneficios o por actividades de investigación y desarrollo. También que con la norma se impulsaría la financiación a los emprendedores y se favorecería su internacionalización, agilizando los visados y dando autorizaciones de residencia a todos los extranjeros que decidan invertir en España y contribuyan a crear empleo. Este proyecto legal fue uno de los principales arietes electorales del PP en las pasadas generales.
Incluirá, entre otras propuestas, la regulación de una segunda oportunidad para emprendedores que hayan fracasado; la creación de un régimen especial en el IVA y la introducción del IVA por criterio de caja; la posibilidad de constituir sociedades de responsabilidad limitada en 24 horas; o la creación de puntos de atención al emprendedor.
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