Economía

Francia y Grecia, los mayores problemas de la Eurozona, según un elitista instituto alemán

El instituto Allensbach ha entrevistado a 750 personas entre empresarios, directivos, ministros, parlamentarios y altos funcionarios

La elite política y económica alemana ve en Francia y Grecia los principales riesgos a la estabilidad de la eurozona y percibe el peligro que supone la creciente resistencia en el sur de Europa a las políticas de austeridad.

La elite política y económica alemana ve en Francia y Grecia los principales riesgos a la estabilidad de la eurozona y percibe el peligro que supone la creciente resistencia en el sur de Europa a las políticas de austeridad.

La habitual encuesta semestral del instituto Allensbach -que en esta ocasión ha entrevistado a 750 personas entre empresarios, directivos, ministros, parlamentarios y altos funcionarios- ahonda en la situación de la eurozona y la evolución de su crisis.

El 53 % de los interrogados considera que Francia es el país que supone un mayor peligro en la actualidad para la estabilidad de la eurozona, seguido de Grecia (41 %), Italia (31 %), España (11 %) y Portugal (11 %).

Además, el 60 % percibe con cierto escepticismo las declaraciones que ponen en el pasado lo peor de la crisis de la deuda, frente al 39 % que consideran que la situación general está mejorando.

En comparación, en 2012 eran el 81 % de los interrogados los que consideraban que la situación iría a peor y, en 2013, el 57 % los que opinaban así.

La encuesta muestra asimismo que el 57 % de los encuestados ven en la caída del gobierno conservador portugués un símbolo de la creciente resistencia en el sur de Europa frente a las políticas de consolidación fiscal avaladas principalmente a nivel comunitario por el Gobierno alemán.

Con respecto a la política monetaria expansiva del Banco Central Europeo (BCE), el 73 % considera que el programa de compra de deuda es "erróneo"y sólo el 49 % considera que el presidente de la entidad, Mario Draghi, hace un buen trabajo.

Por su parte, la canciller Angela Merkel sigue disfrutando, una década después de alcanzar la jefatura del gobierno alemán, un respaldo mayoritario de la elite del país.

Así, el 19 % de los encuestados valoran su actuación en estos diez años como "muy buena"y el 59 % la consideran "buena", frente al 18 % que la califican de "no especialmente buena"y el 4 % que la consideran "mala".

El 83 % de la elite política y económica alemana cree que Merkel tiene una "alta capacidad de implementación", el 73% destaca su "credibilidad", el 67 % apunta que es "competente"y tiene un gran conocimiento técnico de los problemas que aborda, y otro 67 % de los interrogados subrayan que es una "inteligente estratega".