La bolsa española roza los 9.000 puntos con una subida del 0,65 %

La bolsa española ha registrado un nuevo máximo anual en 8.999,50 puntos con una subida del 0,65 por ciento gracias al avance de los mercados internacionales y de los grandes valores, al acuerdo internacional sobre Siria y a noticias propicias sobre la sucesión en la presidencia de la Reserva Federal.

Mientras la prima de riesgo bajaba de 252 a 248 puntos básicos, el índice de referencia de la bolsa española, el IBEX 35, ha subido 57,90 puntos, el 0,65 por ciento, hasta 8.999,50 puntos, con lo que sigue en niveles de finales de octubre de 2011. En el año avanza el 10,19 por ciento.

En Europa, con el euro a 1,335 dólares, Fráncfort ganó el 1,22 por ciento y acabó en el máximo histórico de 8.613 puntos; Milán, el 1,05 por ciento; el índice Euro Stoxx 50, el 0,96 por ciento (acaba en nivel de mediados de mayo de 2011); París, el 0,92 por ciento (precios de la mitad de febrero de 2011), y Londres, el 0,59 por ciento.

El mercado nacional comenzaba la sesión sobre 9.000 puntos impulsado por factores variados, como la subida del 0,5 por ciento de Wall Street el viernes o la retirada del antiguo secretario del Tesoro estadounidense Larry Summers en la carrera a la presidencia de la Reserva Federal -banco central estadounidense-.

El acuerdo internacional para destruir las armas químicas de Siria incidía en el precio del petróleo (el Brent bajaba después de la apertura hasta 108,75 dólares).

Este factor y el anterior incidían en la bajada de la prima de riesgo española a 250 puntos en la apertura (la rentabilidad del bono a diez años descendía hasta el 4,44 por ciento), lo que también apoyaba el avance del mercado nacional.

Esto se debía a la posibilidad de que la actual vicepresidenta de la Reserva Federal, Janet Yellen, se convierta en sucesora de la política monetaria laxa aplicada por Ben Bernake y mantenedora de los estímulos monetarios que ofrecen al sistema financiero y sobre cuyo importe (ahora rondan los 85.000 millones al mes) debatirán esta semana.

Mientras se iban publicando algunas estadísticas sin incidencia relevante en la bolsa (el IPC de la zona euro en agosto subió una décima y la tasa interanual se situó en el 1,3 por ciento), el mercado español se mantenía con altibajos sobre el nivel de 9.000 puntos hasta la apertura de Wall Street.

El máximo histórico de Fráncfort o los máximos anuales de París o el índice Euro Stoxx 50 también servían para impulsar al mercado nacional.

Antes de la apertura de Wall Street se conocían algunos datos sobre la ralentización de la actividad industrial en el estado de Nueva York en septiembre o el leve alza del 0,4 por ciento de la producción industrial estadounidense en agosto.

El mercado neoyorquino subía alrededor del 1 por ciento y se situaba cerca de los máximos históricos conseguidos a principios de agosto, lo que no impedía que la bolsa española redujera sus ganancias y perdiera el nivel de 9.000 puntos.

A falta de una hora para el cierre el mercado nacional reducía sus ganancias al menguar el avance de la banca e incurrir en pérdidas algunas constructoras, lo que impedía que superara al cierre el nivel de 9.000 puntos.

De los grandes valores subieron Telefónica, el 0,98 por ciento; Inditex, en el máximo histórico de 110,65 euros, el 0,59 por ciento; BBVA, el 0,57 por ciento; Banco Santander, el 0,42 por ciento, e Iberdrola, el 0,26 por ciento. Bajó Repsol, el 0,76 por ciento.

Banco Sabadell lideró las subidas del IBEX con un alza del 3,39 por ciento; IAG, gracias a la bajada del petróleo, avanzó el 3,22 por ciento, mientras que Técnicas Reunidas cedió el 3,1 por ciento; Sacyr, el 2,87 por ciento, y Amadeus, el 2,67 por ciento.

Las pérdidas del IBEX estuvieron encabezadas por Jazztel, que cayó el 1,37 por ciento, en tanto que Banco Popular bajó el 0,85 por ciento, seguida por Repsol y Acciona, con un retroceso del 0,73 por ciento.