Energía

La industria española paga por la luz un 28% más que la alemana

El precio neto de la electricidad para uso industrial en España es de 0,086 euros el kilovatio hora, frente a los 0,067 de Alemania.

La industria española paga por la luz un 28% más que la alemana
La industria española paga por la luz un 28% más que la alemanalarazon

El precio neto de la electricidad para uso industrial en España es de 0,086 euros el kilovatio hora, frente a los 0,067 de Alemania.

Aunque en los últimos días la polémica sobre el precio de la electricidad se ha circunscrito al ámbito de los hogares, hay otro sector, el industrial, muy sensible a los costes energéticos. Las compañías suelen trabajar con contratos a largo plazo de suministro eléctrico que tienen precios cerrados que les protegen de las bruscas fluctuaciones que pueden sufrir los precios diarios de la electricidad, como ha sucedido en el último mes. No obstante, estas variaciones les acaban por afectar antes o después. Según los datos de Eurostat, a finales del pasado año, el precio neto de la electricidad para uso industrial en España era de 0,086 euros el kilovatio hora, frente a los 0,067 euros de Alemania o los 0,066 euros de Francia. Es decir, la electricidad para la industria es un 28% más cara en España que en ambos países. Si a este precio se le añaden los impuestos, el diferencial se amplía todavía más.

En términos globales, el diferencial entre los precios medios diarios de la electricidad en los mercados mayoristas de España y Alemania no ha parado de crecer. Si en 2012 era de 47,2 euros el megavatio hora en España frente a los 42,6 euros del país germano, este año se ha disparado hasta los 68,5 euros en el mercado nacional frente a los 48,8 euros de Alemania. Es decir, que el diferencial ha subido desde los 4,6 euros hasta los 19,7 euros, según los datos de la Asociación de Empresas de Gran Consumo de Energía.

Sectores como el cementero, en el que los gastos eléctricos representan un tercio de los costes totales de producción, llevan años denunciando esta diferencia de costes por la importante merma de competitividad que les ocasiona. El año pasado, la industria cementera incrementó sus exportaciones un 5,6%, hasta los 9,7 millones de toneladas, según los datos ofrecidos ayer por la patronal, Oficemen. Este aumento permitió al sector contrarrestar la caída del 3,1% del consumo nacional, que descendió hasta las 11,1 millones de toneladas, situándose de nuevo en mínimos históricos de principios de los años 60 del siglo pasado.

Riesgo de cierre

Sin embargo, si el precio de la energía sigue por encima del que tienen otros competidores, será imposible mantener el ritmo exportados. Es más, el presidente de Oficemen, Jaime Ruiz de Haro, advirtió de que «si el mercado de exportación no es viable por el incremento del coste eléctrico, no se va a poder mantener el empleo y se van a cerrar fábricas que se dedican a la exportación, como algunas plantas costeras». En la actualidad, el sector cuenta con 33 plantas, frente a las 39 de 2007, y 10 empresas frente a las 13 que había antes de la crisis.