La lenta conversión digital

El tejido empresarial de la pyme española tiene muchos frentes abiertos hasta dar el salto al 2.0 definitivo. Destaca el uso de la «e-Administración».

Las pymes españolas tienen aún un largo camino por delante para su total transformación digital. Apenas han dado los primeros pasos, ya que la digitalización va más allá del uso del ordenador y una cercanía al mundo web. Las administraciones y responsables públicos lo saben: desde Europa hay una Agenda Digital 2015-2020. Si bien, desde la Agenda Digital que el actual Gobierno, ahora en funciones, creó en 2013 con el objetivo de impulsar y asegurar la introducción de las TIC en las empresas se marcó 2015 como primer punto de inflexión con unos objetivos básicos a cumplir. En la actualidad, según los últimos datos de seguimiento del «Plan de TIC en PYME» y comercio electrónico queda mucho trabajo por delante. En lo que más se ha evolucionado es en el número de empresas que usan soluciones software, como CRM, para analizar información sobre clientes con fines de marketing, que en 2014 era de 28,5%, por encima del 25% fijado para 2015.

Otros indicadores apuntan un lento avance, pero cabe destacar el retroceso del epígrafe «Empresas que envían o reciben factura electrónica en un formato estandarizado», que pasa de un 23,11% inicial a 21% en 2014, cuando el objetivo era acercarse al 40%. Sin embargo, hay datos que invitan al optimismo, ya que el 72% de las pymes españolas tiene página web y la actividad de compra y venta on-line se ha incrementado notablemente, hasta un 25% y 16%, respectivamente.

Avances

«La incorporación de las nuevas tecnologías a los procesos de negocio de las pymes y microempresas continúa su tendencia de crecimiento. Incluso en los sectores en los que aún se aprecia un cierto retraso en este sentido, los datos revelan que el avance es indiscutible. Sin embargo, quisiera poner el acento en dos consideraciones principales, comunes a todos los sectores analizados: el déficit de formación en TIC de muchos profesionales y la todavía escasa implantación del ‘‘cloud computing’’», apunta Alfonso Arbaiza Blanco-Soler, director general de Fundetec en el último «Informe ePyme 2014. Análisis sectorial de implantación de las TIC en la pyme española».

Desde un punto de vista cuantitativo, merece la pena destacar el avance constante en la implantación y uso de la e-Administración. Cada vez son más las empresas que utilizan el acceso a internet para interactuar con la Administración pública. Sin embargo, como apuntan desde Fundetec, este avance no impide que la percepción de los empresarios sobre la «e-Administración» no sea muy positiva, ya que consideran que aún se trata de trámites complicados para personas que pueden no ser expertas en el uso de las nuevas tecnologías.

Un paradigma tecnológico llamado a facilitar el uso de servicios TIC avanzando a costes razonables es el «cloud computing». Las empresas muestran aún un importante rechazo, fruto del desconocimiento de este modelo de prestación de servicios y de sus implicaciones a nivel operativo. Su utilización puede considerarse como baja, con el 15% de las pymes y grandes empresas y el 8,1% de las microempresas que han adquirido algún tipo de servicio en modo «cloud» a través de internet, como recoge el informe de Fundetec.

Quizás, pese a la lentitud, desde la administración se hace una valoración positiva de España en la integración de la tecnología digital por parte de las empresas, donde España obtiene un 0,36, mejor puntuación que en la mayoría de las demás dimensiones, y avanza más deprisa que la media de la UE, como concluye el «Informe Anual de la Agenda Digital para España (2015)». Se explica porque las empresas españolas hacen un uso cada vez mayor de las nuevas tecnologías digitales, como revela el que la proporción de pymes que venden en Internet haya tenido un fuerte impulso, al igual que las que utilizan la facturación electrónica.