Análisis
Con una población envejecida, Extremadura apuesta por inversiones que atraigan a jóvenes
Los extremeños acuden a las urnas con la vista puesta en Almaraz y una tasa de paro que la sitúa a la cola del país
Eminentemente rural, con una población envejecida y dispersa, las dos provincias más grandes de España acuden el 21 de diciembre a las urnas con la vista puesta en Almaraz, una tasa de paro que la sitúa a la cola del país, la apuesta por la nueva economía y la atracción de talento e inversiones.
En este escenario, presume de ser la comunidad más segura de España, aunque sigue padeciendo sus déficits históricos en infraestructuras.
Estos son algunos datos de una radiografía de Extremadura a escasos días de sus primeras elecciones autonómicas anticipadas.
Crece la población extranjera, se estanca la nacional
La población de Extremadura alcanzó el 1.054.677 personas a 1 de octubre de 2025, 1.692 más que un año antes debido al incremento de los ciudadanos extranjeros, que aumentaron en 6.213 hasta alcanzar los 67.846, el 6,4 % del total, según el INE.
De todos los residentes, 246.411 tienen más de 64 años, el 23,36 por ciento del total, lo que la convierte en la sexta autonomía más envejecida de España.
La edad media de sus habitantes es 45,8 años y la densidad de población se sitúa en 25,3 habitantes por kilómetro cuadrado, una de las más bajas de España que condiciona la prestación de los servicios públicos en una región que, amenazada por el reto demográfico, no ha cerrado ningún pueblo.
La agricultura como pilar y Almaraz en el punto de mira
El PIB de Extremadura creció un 3 % en 2024, cinco décimas por debajo de la media nacional, según el INE, y el PIB per cápita se cifró en 25.227 euros, un 5,8 % superior al registrado un año antes, aunque un 22,7 % por debajo de la media nacional.
Con el sector agrario como uno de sus pilares -aporta cerca del 8 % del PIB-, la región mira con preocupación el recorte propuesto de la PAC a partir de 2028, junto a otros desvelos como la falta de rentabilidad, la escasez de mano obra y el relevo generacional en un sector que cuenta con cerca de 50.000 ocupados en la región.
Todo ello en un territorio con escaso peso industrial que tiene la vista puesta en el futuro de la central nuclear de Almaraz, que se suma a la nueva economía con proyectos multimillonarios de centros de datos e inteligencia artificial, que sigue liderando la producción de energía renovable y que tiene al turismo como motor económico.
En este escenario, las exportaciones extremeñas siguieron batiendo récord en 2024 al situarse en 3.329,8 millones de euros con un incremento interanual del 8,7 %.
Récord de ocupados, pero tercera comunidad en tasa de paro
Extremadura cerró septiembre con 437.300 ocupados, la cifra más alta de su serie histórica, y 68.600 desempleados, según los datos de la EPA que sitúan la tasa de paro en el 13,56 %, la tercera más alta del país.
En infraestructuras, sigue esperando la puesta en servicio del AVE mientras reclama un sistema antiniebla en el aeropuerto de Badajoz, la conexión por autovía con el Levante -aún en fase muy incipiente- y también entre sus dos provincias -las únicas de España no conectadas aún por una vía de este tipo-, en este caso ya en marcha.
La segunda comunidad con más médicos que busca fidelizar a sus residentes
Con 0,95 médicos de atención primaria por cada mil habitantes en 2024, Extremadura se sitúa como la segunda comunidad con más dotación, por encima de la media nacional (0,79), de acuerdo con los Indicadores Clave del Sistema Nacional de Salud.
Retener al personal sanitario es uno de sus desafíos en una región cuyo índice de dependencia en personas de más de 64 años se situó en el 34,93 % en 2024 (31,30 en España) y la esperanza de vida en 83 años.
En clave social, según la Red Europea de Lucha contra la Pobreza y la Exclusión Social (EAPN), un total de 340.000 personas, un 32,4 % de la población, se encuentra en riesgo de pobreza y/o exclusión social, el tercer porcentaje más elevado del país.
La llegada de la universidad privada
De acuerdo con el último informe PISA, los estudiantes de Extremadura se sitúan por debajo de la media española en matemáticas, ciencias y lectura, mientras que la tasa de abandono temprano educativo ha subido al 14,1 %, 1,5 puntos más que la media nacional.
Con una única universidad, de naturaleza pública, Extremadura tiene proyectos de varias iniciativas privadas, entre ellas la Universidad Internacional para el Desarrollo (Uninde), que ya ha recibido el visto bueno del Parlamento regional.