Estado de alarma
Casado tilda de “caótica y partidista” la desescalada y plantea el “pacto Cajal” en materia de Sanidad
Propone un plan "B" para salir del estado de alarma y evitar el rescate, que se extienda el uso obligatorio de la mascarilla y votará “no” a una nueva prórroga
El PP ha presentado su propuesta alternativa de recuperación ante la crisis del coronavirus. Para ello, ha encargado unos trabajos que, bajo el lema “Activemos España”, va a iniciar con los “mayores expertos del partido” mediante una serie de seminarios que llevarán a cabo todos los viernes y que pivotarán en tres ejes: Sanidad, que coordinará la ex ministra de Sanidad, Ana Pastor;Economía, que liderará la expresidenta de la CNMV, Elvira Rodríguez; y Justicia, libertades e Interior bajo la coordinación del magistrado y consejero de Justicia de la comunidad de Madrid, Enrique López.
El líder de los populares, Pablo Casado también proponeun gran pacto de Estado por la Sanidad, que deberá salir de la comisión de reconstrucción, bajo el nombre de “Pacto Cajal” -en recuerdo al premio Nobel de Medicina, Santiago Ramón y Cajal,- en el que se fije una financiación suficiente, una mejora de la investigación, y apueste por “potenciar” una industria nacional, así como la creación de una agencia nacional de Salud Pública donde haya un representante de cada comunidad autónoma. Además, insistió en la importancia de “reforzar” la atención primaria, también vía telefónica y domiciliaria; llevar a cabo circuitos de infecciosos perfectamente diferenciados “donde no haya cruces ni de personal ni de material”.
Frente a la ausencia de un plan "B" del Gobierno de Sánchez insistió en que existen por lo menos seis leyes que pueden llevar a cabo esa escalada garantizando los derechos y libertades frente a la “excepcionalidad constitucional”. Por ello los populares, que no negociaron con el Gobierno las anteriores pórrogas del estado de alarma, tampoco lo harán ahora. Casado adelantó que votará “no” en la próxima votación, porque considera que no se puede alargar más “esta excepcionalidad”. Solo apoyarán los reales decretos que consideren “positivos” para los españoles, pero advirtió de que el PP no va a formar parte de la cogobernabilidad de Sánchez e Iglesias. Asimismo, consideró que el Gobierno "está muy cómodo” con la excepcionalidad de los poderes que le da el estado de alarma.
“Desescalada ideológica”
“La mala respuesta del Gobierno ante la pandemia nos va a hacer convivir con el COVID-19 durante meses o años”, advirtió Casado y además, por los cálculos que manejan, aseguró que “hasta el 80% de la población no se ha inmunizado, por lo que hay mucho riesgo de repuntes”. Por ello el PP no entiende la “caótica y partidista” desescalada o el hecho de que en la hora habilitada para que las personas más mayores salgan a la calle, “vayan sin mascarillas”. El líder del PP volvió a apostar por los test masivos a la población y propone el uso obligatorio de la mascarilla. Subrayó que hay estudios que indican que, la transmisión del COVID podría ser prevenida solo con su uso algo que sospecha no se ha hecho “porque tampoco han sido capaces de garantizarlas para los sanitarios", criticó. Al mismo tiempo, el líder de los populares propone que se implente del seguimiento de la "la huella de contagio” mediante aplicaciones informáticas, además de distanciamiento social donde “no se base todo en el confinamiento”.
En materia económica, los populares apuestan en su plan por evitar el rescate y recaudar más evitando subidad masivas de impuestos y eliminando gastos superfluos mediante la reducción de altos cargos, ministerios o subidas de sueldos de esos cargos, entre otras. Además, apuesta por extender los ERTE hasta el 31 de diciembre, exonerar del pago de impuestos para la apertura de empresas.
El PP aseguró que no está en contra de la “renta mínima”, pero propone la “tarjeta social”, de manera que cada prestatario de ayuda pública tenga un registro de qué recibe de comunidades, ayuntamientos o de la ayuda estatal.
Abstención por presos
Casado denunció las “cesiones” que se están produciendo por parte del Gobierno en el marco de las negociaciones del estado de alarma. Entre ellas la abstención de Bildu en la última prórroga del estado de alarma que apuntó: “Parece que no fue gratis”. Al presidente del PP le gustaría tener información sobre esa cuestión. “Lo mínimo ya es decir si a costa del apoyo de Bildu se están acercando presos etarras, con delitos de sangre a las cárceles cercanas al País Vasco". También apuntó al hecho de que el PNV, a cambio de que diera su “sí” a la prórroga del estado de alarma habría tenido una “discrecionalidad" en la desescalada pasando a la fase 1 el País Vasco.
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