El personaje

Laura Borrás, la burguesa “indepe” y señorona

La portavoz de JxCat mantiene un elevado tren de vida y dicen en su partido que «vende euforia» frente a los «tristes de ERC»

Ha sido la voz de Carles Puigdemont en Madrid y ahora es su mujer presidenciable a las elecciones del catorce de febrero. Laura Borrás Castanyer pertenece a esa elitista burguesía catalana fervorosa del soberanismo. “Una pija metida a independentista”, dicen quienes bien la conocen. Pero esta Doctora en Filología Románica, que ha paseado su porte de gran señora bajo una imponente estatura por el Congreso, tiene la misión de movilizar el voto separatista y desmontar las traiciones de ERC por sus pactos con Sánchez. Laura ilusiona a la gente frente a los cabizbajos de ERC”, aseguran en JuntsxCat, la coalición impulsada por el fugitivo de Waterloo. Borrás destaca el fracaso de la gestión de los republicanos al frente de sus puestos en La Generalitat y resta importancia a su imputación por el TS por delitos de prevaricación en su etapa como Directora de la Institución de las Letras Catalanas. “Eso aquí nadie lo tiene en cuenta”, zanjan en su equipo de campaña.

En efecto, cuando Borrás salga elegida diputada en el Parlament el tema volverá al Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC), "y vuelta a empezar", añaden. De manera que esta mujer grandullona, elegante y simpática lidera una candidatura elegida en primarias, muy a la medida de Puigdemont, llena de nombres de altos cargos de La Generalitat, alcaldes, dirigentes regionales y hasta empresarios independentistas como el presidente de la Cambra de Barcelona, Joan Canadell. "Laura llega a la fibra de la gente frente al fracaso de ERC y las payasadas de Rufián en Madrid", aseguran sus leales. Especialista en Literatura, doctora en Filología, ex consejera de Cultura con el Govern de Quím Torra, ha tenido un buen verbo en español durante sus intervenciones en el Congreso. "No quiero eliminar el castellano, pero es una lengua de imposición", dijo desde la tribuna de oradores.

Laura Borrás Castanyer nació en Barcelona en una familia acomodada de la burguesía catalana. Hija de un prestigioso médico, se caso también con otro médico, Xavier Botet, miembro de una elitista familia propietaria de la casa modernista Caadeús i Botet, en Igualada. Padres de una hija conocida "youtuber", Marta Botet, la pareja no esconde su elevado tren de vida, a tenor de la declaración de bienes de Borrás en el Congreso. Como Directora de la Institución de las Letras Catalanas, declaró unos ingresos de casi cien mil euros, participaciones en algunos fondos de inversión y un piso en una de las mejores zonas de Barcelona. Una de sus pasiones son los coches, adquirió un Jaguar XF en el año 2102, un Toyota Yaris poco después y ahora se pasea por la ciudad condal con un BMW. Pero esta buena posición social no la impide mezclarse con la gente en los barrios "indepes" y captar ese voto no de izquierdas invocado por ERC. En JuntsxCat aseguran que mucho voto republicano se está pasando a ellos. "Borrás vende euforia frente a los tristes de Esquerra", advierten.

Avalan esta tesis con la sospecha de que ERC puede pactar un gobierno con los Comunes y el PSC, el débil liderazgo de su candidato, Pere Aragonés, la nefasta gestión de sus consejeros en La Generalitat al frente de Salud y Trabajo, la permanencia del líder Oriol Junqueras en prisión, las bufonadas de Rufián en el Congreso y su alianza con la EH-Bildu de Arnaldo Otegi así como el apoyo a los PGE de Sánchez. "Se han vendido a Madrid", acusan estas fuentes. La estrategia de Borrás y sus candidatos exhibirá gestión, junto a un discurso soberanista muy medido, que permita también atraer antiguos votantes de CiU. Un voto tradicional de la burguesía catalana, que aún siendo nacionalista, ofrece pragmatismo sin asustar del todo a los empresarios. "Con el dinero no se juega", dicen en estos círculos económicos alarmados por el discurso radical de izquierdas de los republicanos.

En el terreno personal Laura Borrás es una mujer cercana, educada, que ha mantenido buenas relaciones con los periodistas del Congreso frente a los exabruptos de Gabriel Rufián. Su estilo es extremado en todo, muy a la imagen de la ex primera dama norteamericana, Michelle Obama. La candidata de JuntsxCat tiene una elevada estatura de casi dos metros y viste como una auténtica señorona. Prendas sastre, abrigos de capa, faldas de tablones con vuelo a media rodilla, cinturones de marca y tacones altos. Todo ello adornado con collares y bisutería. Borrás luce también una larga melena que agiganta su figura y despliega una buena oratoria en varios idiomas, castellano, catalán, inglés e italiano, fruto de sus estudios en universidades europeas y americanas. Su formación como literata y su etapa de profesora especializada en la difusión de las letras en entornos digitales la hacen dinámica en el trato con los demás. Esta cualidad supieron verla también los militantes de JuntsxCat que la eligieron candidata por una abrumadora mayoría del setenta por ciento.

Hoy el partido celebra su segundo proceso de primarias para una lista en la que Borrás estará acompañada por nombres bien conocidos del soberanismo, altos cargos de La Generalitat, dirigentes regionales, algún abogado y empresario cercanos a Puigdemont que conjugan perfiles de gestión con trayectoria de partido. Esta es la baza contra los republicanos a quienes acusan de nefasta gestión, traición a Cataluña por sus pactos en Madrid, proximidad a los filoetarras de EH-Bildu y languidez en sus candidatos. Laura Borrás, la nueva musa del independentismo, lo tiene claro: “Nosotros proyectamos ilusión, ellos tristeza”,