Terrorismo

El yihadista detenido en Melilla era un delincuente común que se había pasado al Estado Islámico

La Guardia Civil encontró en su domicilio abundante material de Daesh para el auto adoctrinamiento

Imagen de la cárcel de Córdoba
Imagen de la cárcel de CórdobaEUROPA PRESS/IIPP

Presos comunes que, tras pasar por prisión, donde son radicalizados por yihadistas, ingresan en las filas de Daesh (Estado Islámico, Isis). El Servicio de Información de la Guardia Civil ha detenido en Melilla a uno de estos individuos que ya ha ingresado en prisión, tal y como adelantó ayer LA RAZÓN.

Se trata de individuos muy peligrosos que utilizan lo aprendido en la delincuencia común para los fines terroristas. En este caso, los especialistas de Benemérita han contado con la colaboración de la Secretaría General de Instituciones Penitenciaria.

Gracias al trabajo de los funcionarios de prisiones, se pudo detectar el proceso de radicalización de este individuo en el Centro Penitenciario “Sevilla II” de Morón de la Frontera (Sevilla), donde el detenido cumplía condena por ser autor de varios delitos comunes, algunos de ellos comprendiendo el uso de la violencia.

Se descubrió que el interno consumía gran cantidad de material audiovisual, cuya autoría y difusión es utilizada como herramienta de captación y reclutamiento por organizaciones terroristas yihadistas, y que paulatinamente le estaba situando en postulados más radicales.

En el registro realizado en el domicilio de su residencia habitual, en la Ciudad Autónoma de Melilla, se incautó numeroso material y efectos, sobre todo de tipo informático. Se ha comprobado la “la alta impregnación que han logrado los órganos de propaganda oficiales de DAESH en las redes sociales, en un intento de contrarrestar las pérdidas humanas y de territorio que le han sido infligidas en zona de conflicto”, subraya la Guardia Civil.

Los agentes continúan con el estudio y análisis de las evidencias con el fin de reforzar y obtener información relevante para esclarecer completamente la actividad y vinculaciones de este individuo, así como la apertura de otras líneas de investigación.

La detección temprana de procesos de radicalización en personas que se encuentran bajo la influencia de reclutadores del DAESH, tanto a nivel físico como virtual, supone a día de hoy uno de los mayores retos investigativos a los que se enfrentan las fuerzas de seguridad.