Espionaje

El Gobierno descarga a Bolaños de toda responsabilidad por Pegasus

El juez ha citado al ministro de la Presidencia el próximo 5 de julio, pero su declaración seguirá siendo secreta según la materia clasificada a la que afecte

El ministro de la Presidencia, Félix Bolaños, declarará el próximo 5 de julio ante el juez de la Audiencia Nacional que lleva el «caso Pegasus». El magistrado José Luis Calamaacaba de levantar el secreto de sumario, sin embargo, fuentes conocedoras de las diligencias, puntualizan que tanto lo que diga Bolaños como lo declarado ya por los funcionarios del Centro Nacional de Inteligencia (CNI) que afecte a la médula del Estado seguirá siendo secreto porque pertenece a información clasificada. El Gobierno, por su parte, descarga a Bolaños de toda responsabilidad en el «caso Pegasus» y asegura que la «única razón» por la que se le ha citado en sede judicial es porque fue él «quien dio cuenta de la denuncia».

En el Ejecutivo mantienen que «desde el primer momento, el Gobierno ha actuado con absoluta transparencia y disposición de colaborar con la Justicia». Sin embargo, la liebre que levantó el propio Ejecutivo sigue corriendo y el caso no acaba de cerrarse. Fuentes gubernamentales no muestran preocupación sobre este asunto y aseguran que es una cuestión que no está entre las prioridades de los españoles. El propio ministro de la Presidencia se pronunció ayer desde el Senado señalando que se va a aportar toda la información «que obra en poder del Gobierno» para que el «juez lo conozca todo», porque «somos los primeros interesados en saber quién nos espió». «Somos un Gobierno honrado y colaboramos con la Justicia, no obstruimos su labor», dijo.

El velo que ha recubierto la investigación durante algo más de un mes se destapó este martes pero, en realidad, se trata de un alzamiento de secreto de alguna forma parcial. Quedarán visible para las partes -únicamente está personada la Abogacía del Estado de quien partió la denuncia- algunas decisiones del juez e informes de la Fiscalía, si bien nada de lo mollar. Ni lo que declaró el trabajador del CNI que elaboró los informes advirtiendo de que los móviles de miembros del Gobierno habían sido infectados con Pegasus en 2021, ni lo que reveló la exdirectora de los espías Paz Esteban. Tal y como adelantó este periódico, Esteban acudió el pasado viernes a la Audiencia Nacional para relatar cómo funciona internamente la seguridad de la Inteligencia. Unas palabras determinantes para la protección del Estado que los investigadores consideran que no deben quedar accesibles para todos. Por eso, según aseguran estas fuentes, no trascenderán los detalles ni de esto ni presumiblemente de lo que cuente Bolaños.

Poco ha trascendido de las razones por las que el ministro de la Presidencia tendrá que acudir A la cita. Cuando se produjo la injerencia en los teléfonos del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez; la ministra de Defensa, Margarita Robles; el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska; y el responsable de Agricultura, Luis Planas; era él quien dirigía el departamento de Seguridad insertado en La Moncloa. En cualquier caso, estas fuentes de la Audiencia Nacional consideran que lo que cuente Bolaños también afectará al esqueleto de la Seguridad Nacional y, por tanto, debe quedar oculto.

Para terminar de cerrar los flecos de esta investigación Calama ha cursado una ampliación de la petición de información a Israel, sede de la empresa NSO Group dueña de Pegasus. Hace semanas envió la primera solicitud de cooperación internacional para rellenar algunos datos del programa espía que se inyecta en los móviles sin dejar apenas rastro. Ahora, lo que ha solicitado es que le autoricen a acudir en persona allí e interrogar al CEO de la empresa.