«Bastante movimiento» en el bar: 15 entradas y 18 salidas en una hora

Absolutamente todo ha sido estudiado y analizado al detalle por los peritos encargados de visionar las imágenes grabadas por la cámara de vigilancia instalada frente a la entrada del bar Faisán. Uno de los aspectos en los que más hincapié han hecho es en el número de personas que accedieron o salieron del establecimiento entre las 10:55 horas del día 4 de mayo (justo después del primer corte descubierto en la cinta 122) hasta las 12:00 horas. Pero también observan con detenimiento aquellas personas que pasan y las que se detienen pero no entran al establecimiento.

En total, en esa hora y cinco minutos que analizan los expertos «se registraron 15 personas que entraban al bar y 18 que salían», aseguran en su informe. Eso sí, hay que tener en cuenta que en ese intervalo de tiempo es en el que se produce el segundo corte intencionado en la grabación, por lo que podría haber alguna persona más que no fuese captada por las cámaras de los agentes. Los peritos hablan de «bastante movimiento de gente».

Algo que parece llamar la atención de los analistas es el hecho de que son varias las personas que se detienen justo frente al bar, se quedan mirando su interior y, acto seguido, abandonan la zona sin entrar. «A las 11:03 horas podemos ver el sujeto con una camisa blanca que se para a mirar en el interior del bar y luego, acto seguido, mira hacia el otro lado y finalmente se aleja del bar»», explican los peritos en su informe.

También tienen controlada la entrada, a las 10:57 horas, de tres mujeres, a las cuales les sigue un hombre «con gafas y una chaqueta blanca en las manos. También se puede apreciar un poco de calva en el hombre», comentan. Cualquier detalle podría ser importante, y más cuando esa entrada ha estado tapada por los numerosos vehículos que pasan por la calle.

«A las 10:59 horas sale una mujer vestida de oscuro del bar»; «a las 11:01 horas entra una mujer con bolso rojo»; «A las 11:06 horas salen tres mujeres y el hombre de gafas que entró a las 10:57 horas»... Así con absolutamente todos los movimientos registrados en ese espacio de tiempo a analizar.

Incluso, perciben cómo algunas de las personas que acuden al Faisán se tapan –o parece que lo hacen– la cara: «A las 11:07:35 entra un hombre con una chaqueta de vaqueros. Y sucesivamente entra otro hombre con una camiseta blanca que parece taparse la cara», explican en el informe. Eso sí, confirman que «durante el análisis de la grabación entre el lapso de tiempo analizado ninguna otra persona trató de taparse».

La cinta sigue avanzando y «a las 11:30 se aprecia en la puerta del bar al señalado policialmente como Inspector Ballestero», dice el informe pericial; «a las 11:31 horas salen tres personas»; a las 11:31 entra un hombre en el bar» –continúa– y «a las 11:34 horas se observa un aumento del zoom de la cámara», algo que los investigadores creen que se debe al intento de los agentes «de analizar algo interesante dentro del bar». Acto seguido confirman que «se quita un poco de zoom y se puede observar una persona de espalda con una camisa de cuadros».

Prácticamente todos los movimientos de personas en aquel espacio de tiempo están controlados, minutados y detallados al milímetro. Incluso en alguna de las imágenes, llegan a acercarse tanto que pueden ver a la gente del interior, como a las 11:35 horas, cuando una persona se asoma a la puerta y al volver a entrar comienza a conversar con otro de los clientes del bar investigado. Esta misma persona volvió a asomarse a la puerta del bar menos de 10 minutos después, a las 11:43 horas. Y así hasta las 11:58, cuando se produce el último movimiento: «Sale un hombre del bar vestido oscuro, mira a los dos lados de la calle y se va».