C’s, el partido de los votantes infieles

Pierde un 19,3% de los votos que obtuvo el 20-D frente al PP, que mantiene el 89,2%

Aunque Ciudadanos presenta un porcentaje de fidelización de su electorado del 20-D más bajo que PP, PSOE y Podemos, es la fuerza que más sube, junto con IU. Ciudadanos ha perdido un 19,3% de sus votantes del 20-D, porcentaje muy superior a las fugas del PP, que han sido del 10.8%, y también mayores a las del PSOE (16,5%) o las de Podemos (18,4%). Los populares los que más votantes mantienen leales, concretamente conserva el 89.2% del voto del 20-D. Le sigue el PSOE que retiene el 83,5% y en tercera posición Podemos que fidelizan el 81,6%.

La principal causa de fuga es en todos los casos la abstención; Podemos pierde el 9,8% de sus votantes por esta causa, el PSOE se desprende del 8,3% y el PP transfiere a la abstención el 6,1%. Le siguen los votantes que ceden al PSOE (4,2%) e IU (2,1%) en el caso de Podemos. Mientras que en entre los socialistas es la salida de votantes a Ciudadanos (2,8%) y a Podemos (2,8%). Para el PP, la segunda causa más importante de salida de votantes es la marcha a Ciudadanos del 3,4% de sus votantes del 20-D. Entre los cuatro partidos más votados, Ciudadanos es el que mayor porcentaje de votantes envía a la Abstención, concretamente el 12,9% del electorado de los de Rivera se abstendría ahora, frente a tan solo el 6,1% de los votantes del PP. Estos datos hacen necesario explicar con detalle por qué finalmente sube más que los tres más votados el 20-D, si es el que menos votantes retiene.La respuesta es que es el único de los cuatro grandes partidos que no pierde votantes con respecto al 20-D; el saldo neto de Podemos es de -440.000 votantes, el del PSOE es de -406.000 y el del PP de -52.000 votantes. Los tres grandes tienen saldos negativos de votantes con respecto el 20-D y Ciudadanos en cambio no.Ciudadanos conserva al 80,7% de sus votantes del 20-D, por lo que pierde 1 de cada 5 y no es difícil imaginar que son votantes de su ala derecha. Pero estas fugas son compensadas por los votos que ingresa ahora procedentes del resto del naufragio de UPyD y de los nuevos electores, todos ellos ubicados mayoritariamente en el centro-izquierda, que suplen las importantes pérdidas por su diestra. También recibe más votos procedentes del PSOE que en la encuesta del pasado febrero, y menos del PP.

El saldo neto de Ciudadanos con respecto al 20-D es de una ganancia neta de poco más de 2.000 votos, pues pasa de los 3.500.541 a 3.503.000 votantes.

Ciudadanos se desprende de 452.000 votantes del 20-D que ahora eligen abstenerse. Así como de 146.000 votantes que pasan al PP, de 65.000 que se pasan al PSOE y de 11.000 que se trasvasan al resto de partidos políticos. En total, en poco más de dos meses, se han dado de baja de su base electoral 674.000 votantes, es decir el 19,3% de los que confiaron en Rivera en las elecciones generales de 2015. Pero a cambio, en este mismo periodo, ha ingresado 676.000 votantes, por lo que las ganancias son de dos millares de votos, que más arriba ya se refería. Este saldo prácticamente cero unido a la bajada en la participación hace que suba porcentualmente más que ningún otro partido. Estos votos que recibe se pueden cuantificar del modo siguiente; 248.000 llegan desde el PP, otros 157.000 proceden del PSOE, 113.000 votos son aportados por ciudadanos que se abstuvieron en 2015 y nuevos lectores, 97.000 vienen de UPyD, 46.000 son transferidos desde Podemos y otros 15.000 tienen su origen en el resto de partidos políticos, por lo que la suma total es de 676.000 votos.El 20-D el voto de UPyD llegó a representar el 16,3% del total de votantes del partido naranja. Entonces recibió 570.000 votos magentas, que suponían el 49,9% del voto conseguido por Rosa Díez en las elecciones generales de 2011. Ahora sumaría otros 97.000, que representan el 63,4% del total de los 154.000 votos que obtuvo UPyD en las elecciones generales del 20-D. Es decir que acaba captando 2 de cada 3 votantes de UPyD.

Aunque ahora, como en diciembre, sus dos principales fuentes de votantes siguen siendo el PP y el PSOE. El 20-D el voto que sustrajo al PP representó el 52,8% del voto que sumó Rivera. El 20-D el voto socialista representó el 17,1% de todo el voto riverista. Los populares transfirieron al partido naranja 1.850.000 votos el 20-D, desde entonces y hasta ahora la cantidad se ha reducido a 248.000 votantes, mientras que el PSOE aportó en las pasadas elecciones generales 600.000 votantes y en estos dos meses 157.000 votantes, es decir, que de los 757.000 votos que el PSOE ha trasvasado a Ciudadanos, el 20,7% lo ha sido desde el 20-D hasta la fecha, porcentaje muy superior al de los votantes del PP que se han pasado con armas y bagajes a los de Rivera; en todo este proceso el PP ha inyectado 2.098.000 votantes en Ciudadanos, de los cuales el 11,8% en los dos últimos meses, frente al 20,7% de los socialistas.