Camaretas de 12 personas, maniobras, navegación en el Elcano... Así será la "mili" de Leonor

A finales del próximo mes de agosto, la Princesa Leonor tendrá que presentarse en la Academia General Militar de Zaragoza. Arrancará así la tan esperada formación castrense de la heredera de la Corona, quien comenzará en esta nueva andadura como dama cadete y concluirá, tres años después (lo normal son cinco años), como teniente de los ejércitos de Tierra y del Aire y como alférez de navío de la Armada. Todo, con el objetivo de que, una vez sea proclamada Reina, ejerza como Mando Supremo de las Fuerzas Armadas.

Una formación, al igual que la de Felipe VI, que será específica para ella por sus «especiales responsabilidades», por lo que tendrá una duración de tres años, en los que pasará por las tres academias militares: Zaragoza (Tierra), Marín (Armada) y San Javier (Aire). Así lo confirmó ayer la ministra de Defensa, Margarita Robles, en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros, en la que se presentó el Real Decreto por el que se regula tanto la formación como la carrera militar «específica» de la Princesa.

Así, en el curso 2023-2024 se incorporará al Ejército de Tierra como dama cadete en Zaragoza y tendrá su primer contacto con la milicia. Será encuadrada, como el resto de alumnos, en el I Batallón de Cadetes y estará a las órdenes de un teniente coronel. Durante las primeras dos semanas pasará por el Módulo de Acogida, Orientación y Adaptación a la vida militar (MAOA), alojándose en camaretas de hasta 12 personas.

Una fase que da paso a la primera etapa de instrucción y adiestramiento, con actividades como marchas, recorridos topográficos, ejercicios de tiro reales y en simulador o integración en pequeñas unidades (escuadra y binomio en primer curso). Y es en esos compases iniciales en los que vivirá las primeras tradiciones castrenses, como la recepción de su bandera de percha, la entrega de sables por parte de los cadetes de segundo curso o la presentación ante la Virgen del Pilar. Todo, antes de la jura de bandera, cuando se despedirá de sus compañeros de primer curso y se unirá a los de segundo, ampliando así sus conocimientos sobre el Ejército de Tierra.

De Zaragoza se trasladará a Marín (Pontevedra) para incorporarse al tercer curso de la Escuela Naval Militar con el empleo de guardiamarina, donde su formación se centrará en las particularidades de la Armada, desde el derecho marítimo hasta la navegación en diferentes buques. Y será en ese curso 2024-2025 en el que se embarcará en el buque escuela de la Armada, el Juan Sebastián de Elcano, para el tradicional crucero de instrucción.

Por último, en el curso 2025-2026 se formará en la Academia General del Aire de San Javier (Murcia) con los alumnos de cuarto año, adquiriendo conocimientos de aeronáutica con el empleo de alférez alumna. Allí aprenderá meteorología, sistemas, comunicaciones o técnicas de mando.

Una vez finalice su particular formación, en el curso 2026-2027 recibirá su despacho de teniente (Tierra y Aire) y alférez de navío (Armada), incorporándose como cabeza de las promociones en las que ha estudiado y que concluyen ese año. Eso sí, sin ocupar plaza de plantilla. A partir de ahí, irá ascendiendo de empleo según lo vayan haciendo dichas promociones.

Una formación militar que, como deja claro la Casa del Rey, confluirá con la universitaria para lograr un título de grado. De hecho, en cada Academia se imparte un grado oficial de Ingeniería. Aunque, como explicó Robles, una vez finalizados esos tres años se podrá incorporar a los estudios universitarios que considere.

Una vida de "exigencia y sacrificio" castrense

El de ayer fue un anuncio que se esperaba, ya que en tan solo siete meses, la Heredera al trono cumplirá la mayoría de edad. Según señaló Robles, el Rey Felipe VI «tenía especial interés» en que la formación militar «se hiciera de la manera más rápida posible». Tras el anuncio del Gobierno, la Casa Real hizo público un comunicado en el que los Reyes se mostraron satisfechos de la «voluntad, interés e ilusión» que tiene su hija mayor por recibir formación militar. Añadieron, además, que «la princesa Leonor sabe de la exigencia y del sacrificio que conlleva la vida castrense».Según Felipe VI, la experiencia en el Ejército de la heredera al trono es «muy conveniente y valiosa» porque le inculcará virtudes como «la lealtad, la disciplina, el valor o el compañerismo, y principios como, la ejemplaridad».