Concentración de apoyo a los militares de 45 años: «Mi rango de cabo está en extinción, nadie va a aguantar 15 años aquí»

Este año 400 militares abandonaran su puesto de trabajo, entre 2018 y 2021 aproximadamente lo harán 4.045, según la Asociación Unificada de Militares Españoles (AUME). Tienen 45 años y después de dedicar toda su carrera profesional al Ejército y al servicio de España ahora se sienten «engañados».

La Ley de Tropa y Marinería aprobada en el año 2006 establece que los militares que no sean permanentes, los que no hayan conseguido plaza fija, deberán abandonar el Ejército. Pero ellos se sienten capacitados para seguir trabajando. «Creo que por la edad una persona no deja de ser competente en un puesto de trabajo», asegura la cabo Consorcia Vasco del Campo a La Razón, que el pasado año cumplió los 45 años, por lo que ya no está en activo. Hasta el último día desempeñó trabajos de administración en una oficina de información. Esta cabo se pregunta porque esto no ocurre entre los puestos de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado y sí en las Fuerzas Armadas.

J. Marcos García Rodríguez es soldado en la AGBS, trabaja en la Oficina de la compañía de apoyo y servicio, asegura que se siente «engañado», tiene 40 años y lleva ya varios preocupado por el currículum con el que a los 45 abandonará su puesto. «Me voy a la calle sin ningún tipo de titulación. Los conocimientos me los he tenido que buscar en la calle, sin que el Ejército me diera facilidades», afirma.

En cuanto a la formación también critica que a suboficiales y oficiales sí se les convaliden sus estudios con carrera y sin embargo, a los cabos, como es su caso, no puedan obtener un módulo medio. «No quieren que perdamos el tiempo en estudiar, quieren que estemos siempre en el campo de maniobras», lamenta. «No nos dan ni un título de vigilante en Seguridad, cuando en la calle casi lo regalan», explica. Ante la asignación que tendrá a partir de los 45 años -7200 euros anuales (600 al mes), según la AUME, J. Marcos se está preparando, buscando ya alternativas «porque no espero que el ministerio me facilite nada».

Sobre el Plan de Orientación Laboral que la ministra de Defensa, María Dolores de Cospedal, ha anunciado J.Marcos lo califica como «penoso» porque según su experiencia no hay un seguimiento para la reinserción laboral y es muy complicado optar a las formaciones que ofertan. Concretamente la titular de Defensa anunció un programa que «evoluciona, perfecciona y supera» al programa Sapromil del año 2011 el cual contempla tres vías de proyeccion profesional: la promoción en las Fuerzas Armadas, el acceso a puestos de trabajo en Administraciones Públicas y el acceso a puestos de trabajo en empresas públicas o privadas. Sin embargo varios militares aseguran a este periódico que estas premisas no se han cumplido

Fernando González tiene 42 años y opina que ha dedicado «20 años al servicio y que ahora parecen tirados por la borda» porque «no nos preparan para esto», para la salida al mundo laboral fuera del Ejército. Sobre el futuro del Ejército español, augura que las nuevas juventudes que entran en el Instituto Armado «sólo quieren una mili», porque saben «lo que les espera». «Mi rango de cabo primero está en extinción, nadie va a aguantar 15 años aquí», lamenta.

Al grito de «Queremos trabajar», «Por una carrera y retribuciones justas» o «Aquí no sobra nadie», cerca de doscientos militares se concentraron ayer frente rente al Ministerio de Defensa a la que acudieron cerca de doscientos militares para exigir condiciones laborales más «justas», empezando por unas mejores retribuciones salariales, igualdad de derechos con el resto de ciudadanos y una solución a la temporalidad de los militares no permanentes. Las asociaciones que convocaron la concentración de apoyo han sido AUME, Asociación de Tropa y Marinería (ATME), Asociación de Militares de Tropa y Marinería

A esta convocatoria acudieron los portavoces de Defensa en el Congreso de Podemos, Juan Antonio Delgado, la portavoz socialista Zaida Cantera y el diputado de Ciudadanos Francisco Javier Cano, que, subidos a un escenario dieron fuerzas a los concentrados para seguir reivindicando su causa. También estaba presente el secretario general de Podemos en Madrid y ex Jefe del Estado Mayor de la Defensa (Jemad), Julio Rodríguez, que criticaron a los «patriotas de hojalata» que piensan «que defender a los militares es ir un día al año al desfile, pero que cuando hay que venir al Ministerio se les olvida». La portavoz socialista apremió a la defensa de sus derechos porque «hacerlo no es ningún delito», mientras que el diputado de Ciudadanos admitió que cuando llegó la ministra de Defensa al cargo «tenían expectativas para dialogar con ella»,

pero que a día de hoy siguen esperando.