El presidente del Supremo: «Cuando la Constitución resulta golpeada no puede renunciar a defenderse»

El presidente del Tribunal Supremo, Carlos Lesmes, garantiza que los jueces responderán con «absoluta independencia» a las «embestidas» independentistas y denuncia los «ataques personales» a Llarena y el «gratuito descrédito» a la institución judicial.

El presidente del Tribunal Supremo y del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), Carlos Lesmes, ha defendido hoy con firmeza la actuación judicial frente a las “embestidas” independentistas contra la Constitución. En el acto de apertura del Año Judicial, presidido por Felipe VI, Lesmes ha dejado claro que los jueces no se van a quedar cruzados de brazos porque “cuando la Constitución resulta golpeada no puede renunciar a defenderse”.

El presidente del Alto Tribunal ha defendido, sin citarlo expresamente, al magistrado Pablo Llarena, instructor de la causa contra los líderes del proceso independentista, de los “ataques personales” alentados “no sólo desde ciertos sectores sociales, sino, lo que es más preocupante, por algunos responsables políticos, cuyos reproches resultan censurables en el marco de la normalidad y del respeto constitucional”.

Lesmes ha censurado el intento del frente independentista de pretender “la impunidad bajo el cobijo aparente de la voluntad popular”, una amenaza al “pacto de convivencia intergeneracional” que, sin la respuesta judicial, provocaría un efecto “demoledor” pues el sistema de libertades -ha recalcado- “quedaría fatalmente debilitado”.

El respeto al Derecho, ha hecho hincapié, “es irrenunciable” y ha pedido “lealtad constitucional” -sin necesidad de una “identificación emocional acrítica”- al frente soberanista. Al margen de “frivolidades y demagogias”, ha asegurado Lesmes, ninguna Constitución “ha dado lugar a una convivencia en paz y libertad como la que nos ha proporcionado la vigente de 1978”.

La fiscal general, “firme” ante cualquier injerencia

En el mismo acto, la fiscal general del Estado, María José Segarra, ha garantizado que se mostrará “especialmente firme frente a cualquier intento de condicionar, personal o profesionalmente”, a los profesionales de la Justicia que ejercen su labor en Cataluña ante el “desbordamiento del orden constitucional y estatutario” que persigue impedir el cumplimiento de las resoluciones judiciales y administrativas.

Segarra defendió que las “legítimas aspiraciones políticas de una parte de la sociedad” se encaucen a través del ordenamiento jurídico. “No hay nada más democrático que la ley”, ha insistido, para añadir citando al jurista británico Thomas Fuller: “No importa cuán elevado estés, la ley siempre estará por encima”.

España, ha reiterado, cuenta con un sistema judicial “fuerte” al servicio del estado de Derecho. Y ante la posibilidad de que la Fiscalía reciba indicaciones del Gobierno para rebajar la acusación de rebelión contras los principales líderes independentistas, ha garantizado que el Ministerio Público actúa “con absoluta autonomía” y sólo al servicio del principio de legalidad.