García Page y Fernández Vara no ven problemas para el encaje constitucional de Cataluña

Los presidentes de Castilla-La Mancha, Emiliano García Page, y Extremadura, Guillermo Fernández-Vara, han rechazado hoy la idea de que existen problemas o diferencias grandes en el PSOE de cara al encaje de Cataluña en la reforma federal de la Constitución que llevará Pedro Sánchez en su programa electoral.En la reunión que ha congregado esta mañana en Sevilla a todos los barones socialistas -a excepción del asturiano Javier Fernández, centrado en conseguir la investidura en su territorio-, Page ha defendido que no hay que "inventarse problemas donde no los hay"y se ha mostrado partidario de abrir un debate sobre la ampliación de la Constitución sin que se pierda "la perspectiva de lo que le importa a la gente", que en su opinión es el empleo y la economía.

Ha asegurado que tiene "muy claro"que Cataluña tiene que ser "reconocida en su esencia"porque "la cultura catalana, la lengua catalana forma parte también de la cultura española".

En ese sentido, ha dicho que es partidario de que se pueda contemplar abiertamente en la Constitución "la pluralidad de España", pero dejando muy claro que es "una nación y que lo es única, sin ningún lugar a dudas".

También ha afirmado que es "curioso"que a pesar de que la Constitución del 78 incluye "la existencia de nacionalidades", ese término "no se ha usado o no se le ha dado sentido".

Por su parte, el extremeño Guillermo Fernández Vara ha subrayado que "todos"los socialistas coinciden con la advertencia que hizo la semana pasada en una entrevista la presidenta andaluza Susana Díaz sobre que no aceptaría "autonomías de dos velocidades distintas"en un modelo federal.

"Cuando estamos hablando de repensar el modelo no es para inventar uno nuevo, sino para corregir los efectos que ha tenido el actual en este tiempo de desarrollo", ha afirmado Vara.

A su juicio, al final de este debate "no habrá diferencias grosso modo", aunque "puede haber pequeños matices", ha reconocido.

Como ejemplo, ha puesto que él mismo viene defendiendo que las comunidades tienen que "ceder al Gobierno de España alguna competencia, como es fijar el calendario vacunal", una propuesta con que no todos los socialistas están de acuerdo.

Tras mostrarse convencido de que la visión territorial del líder del PSC, Miquel Iceta, es "compatible"con la de la andaluza Susana Díaz -ambos polarizan las posiciones sobre cataluña dentro del PSOE-, el presidente extremeño ha sostenido que este asunto "no es un tema de nombres, es de tener claro qué queremos que sea España y que cada uno se sienta español como le dé la gana, y que el ser español de una manera o de otra no te otorgue más derechos ni mas deberes".

En su opinión, "lo demás son nomenclaturas y utilización del lenguaje, pero lo importante es que el español, viva donde viva, se sienta más o menos o igual y tenga los mismos derechos en todas partes", ha insistido.