Los escraches no se sancionarán y rodear el Congreso será multa leve

El texto del Anteproyecto de Ley Orgánica de Seguridad Ciudadana que el ministro del Interior, Jorge Fernández, llevará mañana al Consejo de Ministros para su estudio recoge algunos ajustes jurídicos y en el tipo de sanciones con respecto al borrador que se dio a conocer. El texto ha sufrido muchos retoques desde que se esbozó, ya que ha recibido hasta 7 u 8 observaciones, sugerencias y matices que han ido incorporando de los distintos ministerios con el fin de que, por ejemplo, alguno de sus puntos no interfiriera en ninguna ley que ya estuviera aprobada con antelación.

El anteproyecto se someterá mañana a la primera lectura en el Consejo de Ministros, que no tiene por qué aceptar todo lo que figure en el documento. Luego Interior volverá a pedir informes a diferentes órganos con el fin escuchar, si las hubiera, nuevas sugerencias. De esta manera se llevará el anteproyecto a una segunda lectura al Consejo de Ministros y tras su aprobación es cuando será remitido al Congreso de los Diputados.

Con respecto al borrador que se dio a conocer, el Ministerio del Interior siguió trabajando en el mismo y finalmente ha modificado algunos puntos que antes estaban contemplados.

Entre ellos, el texto no sanciona los escraches ni nada que se le parezca, más allá de los casos en que se produzcan alteraciones de orden público o como manifestaciones no autorizadas. En ningún momento el borrador sancionaba los escraches como tal y no hay una categoría especial de infracción para los escraches, sino que se consideran incluidos en el régimen común de las manifestaciones contrarias a la Ley Orgánica del derecho de reunión. Si estas reuniones de más de 20 personas, consideradas concentraciones no son comunicadas a delegación del gobierno y se llevan a cabo serán sancionadas de forma leve. En la normativa de 1992 la sanción fijada era grave.

Otro de los puntos que se han retocado del borrador que se hizo público son las amenazas, coacciones, injurias y las vejaciones a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado que finalmente serán consideradas como sanciones leves y no graves, como figuraba con anterioridad. El anteproyecto destaca que si éstas se realizan en una reunión o concentración cuando el destinatario sea un miembro de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad así como el uso de imágenes o datos personales o profesionales de autoridades o miembros de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad que atente gravemente contra su derecho al honor, a la intimidad o a la propia imagen y que pueda poner en peligro la seguridad personal o familiar de los agentes, de instalaciones protegidas o en riesgo el éxito de la operación. El texto subraya esto pero siempre sin menoscabo del derecho constitucional a la información. Para ello considera suficiente una sanción de entre 100 y 1.000 euros. Aunque el anteproyecto baja la sanción, no comparten la idea de que dichas coacciones, injurias o vejaciones vayan incluidas en el sueldo de los agentes.

En el caso de cercar el Congreso de los Diputados, el texto ya recogía que no estaría prohibido manifestarse. Será sanción leve rodearlo de manera ilegal. Si a esto se añaden otras conductas como llevar el rostro cubierto, violencia que viene a perturbar la seguridad ciudadana –estén reunidos o no dentro del edificio (ya que el texto proteger la institución símbolo democrático)– será considerada como una sanción grave.