Los Príncipes irán con la Reina a la misa de Gloria en Palma

Es evidente que a la Reina le gusta disfrutar de su tiempo de ocio en la residencia que la Familia Real tiene en Palma de Mallorca y sigue siendo fiel a una isla en la que, según ha confesado ella misma, ha pasado muchos de los mejores momentos de su vida. Y a pesar del ambiente complicado y difícil que se respira en estos momentos en el seno familiar, doña Sofía ha optado por instalarse en el Palacio de Marivent junto con su hermana la Princesa Irene, también principal amiga y confidente de la Reina. Juntas estarán allí durante toda la Semana santa y juntas asistieron ayer en la catedral de la capital balear a un concierto a beneficio del Proyecto Hombre Baleares, una asociación que se dedica desde hace décadas a la rehabilitación de drogodependientes. No hay que olvidar que la Reina es la Presidenta de la Fundación de Ayuda contra la Drogadicción, FAD, y se siente muy concernida por todos los asuntos relacionados con la dependencia a sustancias como la cocaína, heroína y otros estupefacientes. Como amantes fervientes de la música clásica, doña Sofía y su hermana disfrutaron escuchando «El canto del destino» de Johannes Brahms y el «Réquiem» de Fauré, obras ambas cuyos objetivos se identifican con los de la organización Proyecto Hombre.

El Rey no podrá disfrutar de la tranquilidad y atmósfera de reposo de Marivent este año. La recuperación de la reciente intervención quirúrgica que le ha sido practicada en la espalda no aconseja tipo alguno de desplazamiento y le obliga a hacer cuatro horas de rehabilitación diaria que algunas personas del Palacio de la Zarzuela califican de muy dura. Una operación de columna de la envergadura de la que ha sufrido Don Juan Carlos requiere para su total restablecimiento de ejercicios dirigidos por un fisioterapeuta que supervise que se hagan de forma correcta. Y también que observe los progresos del Rey en esta fase, que según los expertos calculan que podría extenderse hasta mediados del mes de mayo. En esa fecha, si todo transcurre de forma correcta, el Rey podría volver a retomar su agenda de trabajo y reincorporarse a su tarea institucional, según expertos en este tipo de dolencias.

Mientras tanto, tendrán que ser los Príncipes de Asturias, especialmente Don Felipe, la Reina y la Infanta Elena los que tendrán que seguir asumiendo la representación de la Corona en los actos institucionales programados. Sin embargo, lo que no ha interrumpido Don Juan Carlos es su trabajo de despacho aunque siempre supeditado al horario de los ejercicios de rehabilitación que no pueden sufrir interrupción alguna. Los Príncipes y sus hijas, según fuentes del Palacio de la Zarzuela, acudirán con toda probabilidad a la catedral balear el próximo fin de semana para asistir a la misa del Domingo de Gloria que oficiará el arzobispo de Palma. La presencia de la Familia Real en la seo mallorquina el domingo de Resurrección, aunque se trata de un acto de carácter privado, se ha convertido ya en una tradición. Este año, sin embargo, la representación familiar será más reducida ya que se prevé tan sólo que asistan la Reina, los Príncipes de Asturias y las Infantas Leonor y Sofía. En principio, ni Doña Elena ni doña Cristina acudirán a Palma con sus familias.

Los Duques de Palma optaron este fin de semana por subir a la estación de Baqueira Beret para pasar unos días en la nieve y disfrutar con la práctica del esquí que tanto entusiasma a toda la familia. Unos días de respiro mientras se dilucida si doña Cristina finalmente es imputada o no en el sumario del «caso Nóos».

LA CASA REAL se someterá a la ley de transparencia

El PP garantizó ayer que las partidas administrativas de la Casa del Rey estarán sometidas a la futura Ley de Transparencia, es decir, que se podrán conocer, por ejemplo, los contratos y servicios vinculados a la Jefatura del Estado que dependen de distintos departamentos ministeriales. Así lo aseguró el secretario general del PP en el Congreso, José Antonio Bermúdez de Castro, en una entrevista concedida a Europa Press, en la que desveló que se verán afectadas las cuestiones relativas al personal de la Casa del Rey, que está adscrito al Ministerio de la Presidencia; los edificios que utiliza la Familia Real, que dependen de Patrimonio Nacional; aquellos relacionados con la seguridad y la vigilancia, dependientes del Ministerio del Interior y los demás servicios que puedan prestar a la Jefatura del Estado otros departamentos ministeriales.