Política

Proclamación de Felipe VI

Los Reyes no irán a la recepción del Palacio Real

Los Reyes, en una recepción el pasado febrero
Los Reyes, en una recepción el pasado febrerolarazon

Solemnidad, dignidad y austeridad. Esas tres palabras encierran la clave de la filosofía de lo que el Palacio de la Zarzuela y el Gobierno español quieren para los actos de abdicación del Rey Don Juan Carlos y la proclamación de su hijo, Felipe VI, como nuevo Jefe del Estado español. Eso en cuanto a la esencia del relevo en la Corona española ya que para ellos es fundamental compaginar la importancia y formalidad de un hecho histórico como es el comienzo de un nuevo reinado con el deseo de prescindir de toda pompa y boato que no son compatibles con los tiempos que corren. Otra de las claves que se ha tenido en cuenta es la cercanía que los nuevos Reyes quieren mostrar a los ciudadanos con el recorrido que hará la nueva Familia Real después de la jura en el Congreso de los Diputados. El paseo en coche –aún no se sabe si descubierto o cubierto, aunque seguridad aconseja que el automóvil esté techado– por el Paseo del Prado, la Plaza de Cibeles, la calle de Alcalá y la Plaza de Oriente, servirá a la nueva pareja Real y a sus hijas, la Princesa de Asturias y la Infanta Sofía, para compartir esos primeros momentos de su reinado con la gente que quiera unirse a la celebración.

Poco a poco, se van desvelando todos los detalles en torno a la abdicación del Rey y la jura y proclamación de su hijo, Felipe VI. 1.000 periodistas de 140 medios, correspondientes a 24 países se habían acreditado hasta ayer para asistir a los actos de esta semana. Todos ellos podrán usar el Centro de Prensa que se está instalando en el Senado, muy próximo al Palacio Real, donde tendrán apoyo logístico para poder enviar sus crónicas a sus medios. Los alrededores del Congreso y la Plaza de Oriente serán los lugares donde se instalen las tribunas para los informadores que quieran transmitir sus crónicas en directo.

A las seis de la tarde de mañana, en el Palacio Real y con asistencia de entré 160 o 170 invitados, Don Juan Carlos será el protagonista del acto de sanción de la Ley Orgánica por la cual abdica como Rey. Un acto no demasiado largo, 20 o 30 minutos según fuentes de la Casa del Rey, en el que estarán presentes además de los Reyes, los aún Príncipes de Asturias, las Infantas Leonor y Sofía, la Infanta Elena y las hermanas de Don Juan Carlos, las Infantas Pilar y Margarita. El Gobierno en pleno, representantes de las altas instituciones del Estado, presidentes autonómicos, el Nuncio, decano del Cuerpo Diplomático, los tres ponentes vivos de la Constitución, la cúpula militar, los caballeros del Toisón de Oro, Patronal y Sindicatos y el decano de la Diputación de la Grandeza de España han sido invitados a la firma de la Ley de Abdicación en la que no se descarta que haya algún gesto significativo de Don Juan Carlos hacia su hijo.

Los actos del día 19 comenzarán a las 9:30 en el Palacio de la Zarzuela, con la imposición del fajín de Capitán General del Ejército por parte del antiguo Monarca a Don Felipe. Después, la ceremonia solemne de jura del Rey Felipe VI y su primer discurso, en el que expondrá las líneas maestras que regirán su mandato como Jefe del Estado. En la Presidencia, el núcleo central de la nueva Familia Real, con la Reina Letizia y sus hijas en sitios preferenciales. Frente a ella, en la tribuna de invitados, la Reina, la Infanta Elena y las hermanas de Don Juan Carlos, que ha preferido no estar en el Palacio de la Carrera de San Jerónimo para no restar protagonismo a su hijo.

Familiares de Doña Letizia –no se ha especificado quiénes– estarán en el Congreso y en la recepción posterior en el Palacio Real.

Tras un breve desfile militar, el recorrido por las calles de Madrid, engalanadas para la ocasión, y escoltados por Guardia Real a caballo hasta llegar al Palacio Real, donde los nuevos Reyes y sus hijas, junto con los ya Reyes honorarios, saludarán al público congregado en la Plaza de Oriente. Y para terminar, una recepción a la que se ha invitado a dos mil personas que tendrán oportunidad de saludar a los recién estrenados Reyes en el que se prevé que sea un largo besamanos y donde no estarán Don Juan Carlos y Doña Sofía.

La señal institucional de los actos la dará Televisión Española, como empresa pública que es, aunque la realización de la jura y proclamación del nuevo Rey será responsabilidad de la compañía privada contratada por el Congreso de los Diputados. Un hecho que ha provocado ciertas tensiones entre la Casa del Rey y los responsables del Parlamento español.