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Obama vendrá a España en plena negociación del Gobierno

Obama visitará España en julio. El presidente de EE UU vendrá del 9 al 11 en plenas negociaciones para la formación del nuevo Gobierno

Mariano Rajoy durante una reunión con Barack Obama en la Casa Blanca en 2014
Mariano Rajoy durante una reunión con Barack Obama en la Casa Blanca en 2014larazon

Se reunirá con el Rey y Rajoy como presidente en funciones. Será el primer viaje de un mandatario de EE UU en 15 años

Barack Obama visitará España entre el 9 y el 11 de julio, en el que será el primer viaje oficial a nuestro país de un presidente de los Estados Unidos desde hace 15 años. La estancia de Obama en Madrid y Sevilla y sus entrevistas con Felipe VI y con el presidente del Gobierno en funciones certificarán el cierre definitivo de un periodo de tirantez bilateral entre España y EE UU que la Administración de Rajoy heredó de la época de Zapatero. La visita del presidente estadounidense dentro de un mes, cuando Rajoy seguirá siendo presidente en funciones al haber transcurrido sólo dos semanas desde las elecciones del 26-J, se producirá en plena efervescencia de las negociaciones para la formación del nuevo Gobierno tras las segundas elecciones generales en seis meses.

José Manuel García-Margallo, como titular de Exteriores, ha sido el encargado de llevar las riendas de este largo proceso de reconciliación y, también, de coordinar las conversaciones para cerrar la visita de Obama. El jefe de la diplomacia española reconoció ayer a LA RAZÓN que el viaje comenzó a gestarse durante la visita de los Reyes a Estados Unidos en septiembre del año pasado. El segundo hito tuvo lugar en abril de este mismo año, cuando Margallo se entrevistó con Obama en Washington durante la Cumbre de Seguridad Nacional, una cita internacional a la que el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, no pudo asistir por tener lugar en esos momentos en Madrid las negociaciones para formar gobierno en España. En aquella ocasión, Obama le dijo a Margallo: «A ver si formáis Gobierno, que estoy deseando ir a España». El titular de Exteriores explicó asimismo a este periódico que «hace mes y medio se llamó a nuestro embajador Gil Casares para informar de que el presidente Obama iba en esas fechas y a partir de ese momento se puso todo a funcionar para cuadrar agendas». Margallo aseguró que la iniciativa estuvo siempre presente en la parte americana: «Fue él quien dijo que quería venir a España», dijo. En el comunicado de la Casa Blanca en el que se hacía público el viaje de Obama se hablaba de nuestro país como un «importante aliado» con el que Estados Unidos mantiene una «fuerte relación».

Mariano Rajoy heredó unas relaciones con Estados Unidos que el propio Margallo definió a este diario como «francamente deterioradas». A lo largo de los últimos cuatro años, las aguas han ido volviendo a su cauce. Si la retirada de tropas de Irak durante la presidencia de Rodríguez Zapatero fue el detonante de que se enfriara el clima entre España y EE UU, los hitos durante la primera legislatura de Rajoy en el restablecimiento de la sintonía entre Madrid y Washington han sido el despliegue en la base aérea de Morón de la Fuerza de Respuesta de Crisis de Estados Unidos –que en su última enmienda permite la presencia de 3.500 uniformados– y la ampliación del acuerdo de la Base Naval de Rota, que permitirá la ubicación de 1.200 efectivos.

Otro gesto importante de distensión diplomática fue el acuerdo firmado por John Kerry y Margallo en Madrid en octubre de 2015, por el que EE UU se comprometía a llevarse definitivamente de España los residuos nucleares de Palomares. Estos hechos han ido escenificando la normalización del vínculo transatlántico con EE UU, el segundo eje principal de la política de acción exterior señalada por el Gobierno junto a las relaciones con Iberoamérica.

El significado para Obama del viaje será, sin duda, otro. Los últimos meses del segundo mandato de un presidente de los Estados Unidos suelen estar cargados de simbolismo: la administración saliente trata de consolidar su legado y plasmar las imágenes que quedarán para la historia. La presidencia de Barack H. Obama, que no ha cosechado éxitos sonoros en política interior, sí ha podido apuntarse el tanto, fuera de sus fronteras, del restablecimiento de relaciones con Cuba. El viaje a España en julio se encuadra en un rosario de desplazamientos simbólicos del presidente en el que, además de La Habana, destacan también las históricas visitas a Vietnam y Japón.

Obama llegará a España desde Polonia, donde tendrá lugar la Cumbre de la OTAN entre el 7 y el 9 de julio próximos. En otro orden de cosas, sin duda habrá pesado también, a la hora de tomar la decisión de visitar nuestro país, la estrecha relación de amistad que une a Barack y Michelle Obama con el embajador de Estados Unidos en España, James Costos, que desarrolló un importante papel en la recaudación de fondos para la campaña electoral que otorgó al presidente estadounidense su segundo mandato en la Casa Blanca.

- D. D. Eisenhower: diciembre de 1959. Entre los días 21 y 22 se reunió con Franco en Madrid

- RIchard R. Nixon: octubre de 1970. Visita de Estado los días 2 y 3, cuando se reunió con Franco.

- Gerald R. Ford: junio de 1975. Durante su visita recibió las llaves de Madrid.

- Jimmy Carter: junio de 1980. Los días 25 y 26 se reunió con Suárez y el Rey.

- Ronald Reagan: mayo de 1985. En su viaje de Estado se reunió con el Rey y Felipe González.

- George Bush: octubre de 1991. Asistió a la Conferencia de Paz en Oriente Medio

- W. J. Clinton: 1995 y 1997. En Madrid, cumbre de la UE, y estuvo en Granada con el Rey

- George W. Bush: junio de 2001. Mantuvo una reunión con el Rey y Aznar en Madrid