El PP pide la dimisión de Armengol por su implicación en el "caso Koldo"

La presión sobre Francina Armengol se va haciendo mayor. El PP ha pedido ya este viernes la dimisión de la actual presidenta del Congreso por su implicación en el "caso Koldo" cuando presidía el Govern de Baleares. En concreto, el Ejecutivo de Armengol va a ser investigado por la Fiscalía europea ya que usó fondos europeos para pagar las mascarillas que contrató a la empresa del "caso Koldo", Soluciones de gestión y apoyo a empresas. El Govern de Armengol pagó por mascarillas que no se ajustaban a lo demandado (se necesitaban FFP2 y se abonaron quirúrgicas) y el propio José Luis Ábalos ha reconocido que el contrato suscrito entre la empresa del "caso Koldo" y el Govern balear era una "estafa".

Ante este escenario, fuentes del PP señalan que "la situación" de Armengol "es ya absolutamente insostenible". "Lo que hemos sabido de la investigación en las últimas horas es que el Govern de Baleares que ella presidía fue conocedor y colaborador activo de una presunta estafa con la compra de mascarillas", resumen desde las filas populares. "Aceptó y pagó material sanitario defectuoso, aun sabiendo que no protegía de la Covid y que ponía en riesgo la vida de quienes lo usaban", ahondan.

"Lo abonó con fondos europeos pese a estar prohibido. Lo almacenó pese a que era inservible. Y el día en que abandonaba la Presidencia de Baleares pidió la devolución del dinero para intentar protegerse políticamente", añaden las mismas fuentes, quienes se hacen eco de cómo es nombrada por parte de los miembros de la trama, según la investigación judicial: "'La señora', como aparece citada en la investigación por parte de los miembros de la trama, lo hizo tras haber podido quebrantar la Ley de Contratos, según la Guardia Civil. En este momento su actuación está siendo investigada por la Fiscalía europea".

Por todo ello, en el PP piden su "dimisión inmediata" por un "quebranto para las arcas públicas y una estafa, según palabras de su compañero José Luis Ábalos". "La tercera autoridad del Estado no puede estar bajo sospecha y debe irse para preservar el decoro de la institución que preside", zanjan las mismas fuentes.

Asimismo, dirigentes del PP también se han pronunciado a lo largo de este viernes en la misma dirección. El primero en hacerlo ha sido el portavoz del PP en el Congreso Miguel Tellado, quien ha asegurado que Armengol "no puede seguir ni un minuto más en el cargo que ocupa". "Se mantiene en el puesto porque quiere el aforamiento para no ser juzgada", ha señalado Tellado en una entrevista en "Es Radio" con Federico Jiménez Losantos. En este sentido, el propio Tellado ha insistido en exigir "una explicación inmediata" al presidente del Gobierno "porque el foco de este caso de corrupción está muy cerca de Sánchez".

"No sólo hay implicados ministros o expresidentes de Comunidades Autónomas, sino que también lo están secretarios de organización del Partido Socialista", ha añadido Tellado, quien ha defendido la necesidad de la Comisión de Investigación en el Senado para que comparezcan todos los señalados en la trama, argumentando que la propiciada en el Congreso por el PSOE carece de "credibilidad" ya que la Cámara Baja está presidida por Armengol. "El Gobierno está podrido. Es un caso tremendamente grave, estamos en un escenario inasumible para la democracia española", ha continuado el portavoz popular.

En la misma línea que Tellado se ha mostrado Borja Sémper, quien ha pedido que Armengol no llegue al próximo Pleno como presidenta del Congreso (se celebrará la semana del 12 al 14 de marzo). "No puede llegar al próximo pleno siendo presidenta del Congreso. ¿Alguien entiende que se premie con la presidencia del Congreso a quien pudo ocultar una estafa multimillonaria?", ha preguntado el portavoz popular en una rueda de prensa en la sede.

Lo cierto es que la implicación de Armengol en la presunta trama de corrupción se origina en un contrato de mayo de 2020 (según la querella de la Fiscalía), en plena pandemia: ahí adjudica un contrato por valor de 3,7 millones de euros a la empresa del "caso Koldo" para adquirir 1,4 millones de mascarillas. Sin embargo, las mascarillas que vende la empresa incumplían el contrato porque no se ajustaban a lo demandado por el Govern balear, que quería FFP2 para los hospitales. En este sentido, la acusación que se hace a Armengol en todo este caso es que no reaccionó a tiempo y no presentó una reclamación a la empresa cuando debía para que devolviera el dinero: lo hizo ya prácticamente acabando el mandato, lo que ha levantado sospechas.