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Podemos y Cs acercan posturas y piden al PSOE que se una a su reforma electoral
La reforma que propone Iglesias del sistema electoral beneficia principalmente a los de Rivera, que lograrían incluso más escaños que la formación morada
“Sintonía total” y “voluntad política” en la primera reunión entre Podemos y Ciudadanos para abordar la reforma del sistema electoral. Ambos han pedido al PSOE que se sume a esta propuesta.
“Sintonía total” y “voluntad política” en la primera reunión entre Podemos y Ciudadanos en el Congreso de los Diputados para estudiar en esta toma de contacto político entre los portavoces parlamentarios en la Cámara Baja de los dos partidos, una posible reforma de la Ley electoral. Ambas formaciones son dos de las grandes fuerzas más perjudicadas por el método de reparto de escaños actual, D’Hont, y centrarán a partir de ahora todos sus esfuerzos en este primer periodo de sesiones en la Cámara baja para conseguir una modificación de la Ley Orgánica del Régimen Electoral General (LOREG).
Tras una hora y cuarto de reunión ambos partidos han compadecido ante los medios para avanzar su actitud positiva en cuanto a continuar trabajando para llevar a cabo antes de que finalice la subcomisión constitucional, en el mes de julio, y conseguir una mayoría alternativa parlamentaria que logre reformar la ley electoral. Una mayoría que, según ha explicado la portavoz parlamentaria de Unidos Podemos, Irene Montero, no necesariamente tiene que contar con el visto bueno del Partido Popular. “Es posible reunirse con el PP”, ha dicho aunque ha expuesto sus dudas sobre la posibilidad de que “vayan a querer avanzar hacia una España más igualitaria y justa”.
Así, el objetivo más inmediato de ambas formaciones es lograr que el PSOE se sume a este estudio. “Si el PSOE se suma sería posible llevar una propuesta a la subcomisión antes de julio”, ha dicho Montero. De hecho, Podemos ha abierto la puerta a negociar las propuestas para llegar al objetivo: “Estamos en disposición de hablar con el PSOE para comentarle las propuesta, completamente abiertas a que si compartimos objetivos podamos cambiar las fórmulas concretas para llegar al objetivo”.
En la primera toma de contacto, ambas fuerzas han puesto en común sus propuestas para la reforma de la ley electoral, coincidiendo en la necesidad de eliminar el voto rogado, hacer un “mailing conjunto”, obligar a todos los partidos a hacer debates electorales y cambiar el método de votación actual a uno más proporcional, que sería el Sanite- Lagüe, usado en países como Alemania, Suecia y Dinamarca. Además, han reconocido que reformar la Constitución en la actualidad no es viable, al no haber consenso entre todas las fuerzas, aunque para este punto concreto, alegan, no sería necesario.
Según explicó Podemos tras la reunión lo “principal” es “hacer que el Congreso se parezca más a lo que votan los españoles y españolas. “La proporcionalidad es muy baja en el sistema electoral y hay que acometer una reforma que tenga que ver con que el Congreso se parezca más a lo que los ciudadanos votan”. A partir de ahora deberán llevarse trabajos entre ambos partidos para garantizar la reforma de la LOREG, aunque según reconoció Montero, de momento no se han determinado plazos concretos para una próxima reunión con Ciudadanos. Será el partido naranja el que se ponga en contacto ahora con PSOE y PP para abordar esta reforma, a la que invitan a que se unan. En cuanto a algunas de las propuestas más polémicas de Podemos, la de reducir la edad mínima para votar a los 16 años, Ciudadanos no ha querido valorar de momento ninguna de las propuestas, y ha asegurado que todas son “dignas de estudio”.
La reforma que propone Podemos del sistema electoral beneficia principalmente a Ciudadanos, que lograría incluso más escaños que la formación de Pablo Iglesias si se lleva a cabo esta reforma para las próximas elecciones generales. La formación morada lograría seis escaños más que en las elecciones de 2016, es decir pasaría de 71 a 77, y Ciudadanos, que obtuvo 32, lograría hasta doce más (44), mientras que PP cedería 15 escaños, de 137 a 122 y el PSOE perdería tan sólo uno, de 85 a 84.
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