Reacción

El PSOE señala a Díaz por la gestión de su crisis con Podemos: "No ha sabido imponerse"

No les supone una «sorpresa» la salida de los morados al Grupo Mixto, aunque no la esperaban aún

Acto institucional por el Día de la Constitución en el Salón de pasos perdidos del Congreso de los Diputados. Asiste la presidenta Francina Armengol, el presidente del Senado, Pedro Rollán, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez y el líder de la oposición, Alberto Nuñez Feijoo. Los presidentes autonómicos, Alfonso Fernandez Mañueco, Isabel Diaz Ayuso, Fernando Lopez Miras y Juan Manuel Moreno Bonilla junto con los ministros del nuevo Gobierno. Las ministras Yolanda Diaz, Nadia Calviño, Mar...
Acto institucional por el Día de la Constitución en el Salón de pasos perdidos del Congreso de los Diputados. Alberto R. RoldánFotógrafos

La crisis desatada entre Sumar y Podemos puede tener derivadas directas en el Congreso de los Diputados. El Gobierno de coalición dispone, de facto, con cinco diputados menos con los que contar a la hora de comenzar cualquier negociación en la Cámara Baja.

De los 152 escaños con los que partió la legislatura tras las elecciones generales del 23 de julio a los 147 escaños con los que se queda cinco meses después. Con esta cifra es con la que PSOE y Sumar tendrán que empezar a sumar al resto de partidos de la investidura que necesita para sacar adelante la agenda legislativa. Ahora, el Ejecutivo debe negociar con otras cinco formaciones distintas Bildu, ERC, Junts, PNV y ahora Podemos. Un total de 30 escaños imprescindibles sobre los que no controla su voto y que pueden votar en diferente color según sea la agenda que el Ejecutivo traiga al Congreso.

En el PSOE hubo un momento de tensión tras conocer la noticia de que Podemos abandonaba Sumar para pasar al Grupo Mixto. No gustó, además, porque no conocieron su salida de la viva voz de su secretaria general, sino que se enteraron a la vez que Yolanda Díaz, por los medios. Asumían que, de facto, iban a tener que negociar con un partido más en el hemiciclo. Si bien, en el Ejecutivo se tranquilizaron después de que la propia líder de Podemos y diputada llamara al ministro Félix Bolaños para garantizarle que no pondrían en riesgo la legislatura, aunque pedirían negociar de manera bilateral con el Gobierno.

Si bien no ha causado «sorpresa» en el partido de Gobierno la decisión de Podemos, puesto que vaticinaban que ello ocurriría «pronto». Aunque haya tranquilidad tras la conversación con Bolaños, en el PSOE no ha gustado el modo en el que Yolanda Díaz ha gestionado su relación con los de Ione Belarra en el grupo parlamentario desde las elecciones generales. Fuentes del partido responsabilizan a Sumar por «no saber imponerse» a los morados. Díaz no tenía el control de una sexta parte de su grupo parlamentario desde el inicio de la legislatura ni tampoco logró una minimizar los choques en este tiempo. El veto a Irene Montero en las listas electorales y la ausencia de portavocías para los morados en el Congreso fueron decisiones directas de Díaz que tuvieron como consecuencia la ruptura total. En el partido hay voces que creen que los morados tendrían que haber tenido su espacio y así Díaz contener las discrepancias y la crisis desencadenada.

Aun así, se da el debate por zanjado y así lo asegura el propio presidente Pedro Sánchez, quien, ayer, en una charla informal con periodistas, reconoció que se quedó tranquilo tras la llamada de Belarra a Bolaños. Sánchez también habló con la vicepresidenta Díaz en la noche del martes. El líder del Ejecutivo también ha asumido ya que Podemos será un interlocutor más para negociar la agenda legislativa. Esto ya lo había adelantado el partido en diversas ocasiones. Los votos de Podemos deben negociarse y ahora, de cara a la aprobación de los Presupuestos Generales quieren hablar directamente con Hacienda, donde ahora, aseguran, que hablarán con el Grupo Mixto.