Guerra de banderas en Barcelona

Los concejales republicanos colocan una bandera independentista durante los festejos de la Mercè. Los ediles del PP responden con una enseña española pese a la resistencia de uno de los miembros del Gobierno de Colau

Ni siquiera la fiesta patronal de Barcelona, la Mercè, se libra del independentismo. Ni siquiera después de unas municipales en las que, precisamente, los barceloneses dieron la espalda al soberanismo en favor de Ada Colau. En el balcón del Ayuntamiento se vivieron momentos de tensión durante el inicio de la fiesta de los castellers. El líder municipal de ERC, Alfred Bosch, protagonizó uno de sus habituales exabruptos cuando colgó una bandera independentista del balcón. Instantes después, los concejales del PP Alberto Fernández y Ángeles Esteller intentaron hacer lo mismo con una bandera española, hasta que la alcaldesa medió para retirar las dos enseñas.

La fiesta de al Mercè da comienza con una misa a la que acuden las principales autoridades de Barcelona y Cataluña. El día ya empezó torcido por la desbandada general de concejales. No asistieron ni los ediles del Gobierno municipal, ni los de Ciutadans, ni tampoco los de la CUP. Tras la ceremonia, la alcaldesa recogió a las autoridades para llevarlos hasta el balcón del Ayuntamiento. A la salida de la catedral, una simpática mujer se acercó al president de la Generalitat para decirle: «Señor Mas, dígame, nos va a llevar usted a la ruina, ¿verdad?». Mas sonrió, contestó que no y se marchó. Así, tras el paseíllo, las autoridades se disponían a ver los habituales espectáculos de castellers y gigantes desde el balcón del Ayuntamiento. En un descuido, Bosch colocó la bandera estelada de una de las columnas mientras el público presente entonaba «independencia» a viva voz. Cuando se percataron de lo ocurrido, los concejales populares fueron al despacho a buscar su bandera española. Al intentar colgarla, uno de los concejales del Ayuntamiento trató de impedírselo con escaso éxito mientras la plaza comenzaba a silbar a la enseña española. Artur Mas, al lado, sonreía mientras el propio Bosch pedía tranquilidad a los presentes. Finalmente, la propia alcaldesa intervino para retirar las dos banderas.

Tras el episodio, llegaron las reacciones. Fernández explicó que no se podía «quedar de brazos cruzados» cuando los independentistas han desplegado la «estelada». El líder del PP en Barcelona aseguró que la alcaldesa no intervino. «La alcaldesa no ha atendido a mi requerimiento», explicó Fernández, quien añadió que colgó la bandera española para expresar el orgullo de sentirse «catalán y español». La propia Colau lamentó que PP y ERC utilizasen electoralmente la Mercè, aunque calificó el episodio de simple «anécdota». «Estamos por la libertad de expresión pero el balcón del ayuntamiento representa la pluralidad», explicó Colau. Bosch, por su parte, justificó su decisión «espontánea» de colgar en el balcón del ayuntamiento la estelada porque hoy (por ayer) era el día adecuado para este «gesto de libertad y de esperanza».

C's tampoco asiste a la misa de la Mercè

La líder de Ciudadanos en Barcelona, Carina Mejías, y sus cinco concejales se sumaron al grupo de ediles de Ganemos y la CUP que no asistieron ayer a la tradicional misa de la Mercè. Ada Colau eliminó el culto religioso del programa de festejos atendiendo a la «aconfesionalidad» de las instituciones.