«Secuestro» de la Complutense para calentar el asedio

MADRID- Horas antes de la convocatoria para rodear el Congreso, los primeros momentos de tensión se vivieron en la Universidad Complutense de la capital. Una plataforma de estudiantes había hecho un llamamiento para que la comunidad educativa se encerrara en la Facultad de Políticas del Campus de Somosaguas como acción previa al «asedio». Para evitarlo, el decanato se vio obligado a cerrar las facultades de Somosaguas el miércoles a las 13:30 horas. Eso no evitó que ayer, en torno a una treintena de personas accedieran poco antes de las ocho de la mañana a la Facultad de Políticas con el objetivo de hacer efectivo el encierro. Una vez dentro, según el relato de alumnos, los encerrados bloquearon las puertas de acceso, valiéndose de mesas y cadenas. La tensión fue en aumento. Los partidarios del encierro se enfrentaron al personal de seguridad privada de la Complutense –uno de estos trabajadores resultó lesionado– mientras increpaban a los que, desde el exterior, trataban de entrar al recinto universitario. Dentro, permanecían alrededor de quince empleados de la UCM sin poder salir.

Varios profesores lograron finalmente desbloquear una de las puertas. Al entrar fueron insultados por los integrantes de la Asamblea Somosaguas. «Zarandearon e increparon a algunos alumnos y profesores», según relata un alumno de Políticas a este diario. El vicedecano de Relaciones Internacionales, José Antonio Sanahuja, fue golpeado y le rompieron las gafas.

11 detenciones

El vicerrector de Organización subrayaba a través de un comunicado su más enérgica condena a estos hechos. Y es que ante el riesgo de que la violencia fuera a más, los responsables de esta facultad pidieron al rector de la UCM, José Carrillo, que solicitara la intervención de la Delegación del Gobierno. Tras la petición formal de Carrillo, se desplazaron hasta el campus de Somosaguas siete «lecheras» de la UIP de la Policía Nacional. Poco después de las diez de la mañana, y una vez dentro, procedieron a la detención de 11 jóvenes por coacción. Según fuentes policiales, los arrestados llevaban pasamontañas y capuchas, no iban identificados y, por los panfletos que portaban, estaban llamando a la participación en los actos de protesta frente al Congreso. Todos ellos pasarán hoy a disposición judicial tras permanecer toda la noche en las dependencias de la Policía Nacional en Pozuelo.

La situación que viven los profesores del centro se hace insostenible. David García, profesor titular del departamento de Relaciones Internacionales de la Facultad de Políticas, considera que «a estos estudiantes se les trata de forma muy laxa, hacen lo que quieren. Estamos hartos». García lamenta el cambio de los últimos años: «Las asociaciones antes eran más ideológicas y las de ahora justifican la violencia. Hasta hace poco nunca habían pegado a un profesor y eso ya ha pasado».

Un compañero de departamento de David relató a este diario que el pasado lunes entró un piquete informativo en su clase y al negarse a suspenderla, le dieron un rodillazo en las costillas. «Lo peor de todo es que no se puede hacer nada. La cultura alglosajona permite sancionarles, aquí no».

Armados con cócteles molotov

También en la Complutense, la Policía Nacional detuvo este miércoles a tres personas que portaban varios cócteles molotov. Los detenidos se encontraban junto a una sucursal bancaria cercana a la Facultad de Ciencias de la Información. Según precisó ayer Cifuentes, los tres están ligados a un grupo de la izquierda radical y antisistema. Uno de ellos tiene antecedentes por atentado contra un agente policial. El juzgado de instrucción número 27 de Madrid decretó prisión provisional, comunicada y sin fianza para los tres.