Política
Rueda reclama más competencias y anuncia un equipo específico para analizar el impacto de la guerra comercial
El líder gallego defendió en el Debate sobre el Estado de la Autonomía un mayor autogobierno para Galicia
El presidente de la Xunta, Alfonso Rueda, reivindicó este miércoles en el Parlamento de Galicia un "autonomismo útil" con nuevas competencias para Galicia y una estrategia económica para afrontar los retos de un escenario internacional cada vez más complejo.
En su intervención, recogida por Europa Press, Rueda tendió la mano a la oposición para lograr un acuerdo parlamentario que permita a Galicia asumir, mediante una ley orgánica, la gestión de los permisos de trabajo para inmigrantes.
En el marco del pleno sobre el Debate sobre el Estado de la Autonomía el presidente autonómico defendió que "sería positivo que Galicia pudiera autorizar de forma ágil que los extranjeros que quieran establecerse aquí para trabajar puedan hacerlo sin trabas". Esta iniciativa, explicó, se enmarca en su apuesta por una mayor capacidad de decisión de Galicia en ámbitos clave para su desarrollo.
En este sentido, Rueda ha destacado el "gran paso" que ha supuesto para el autogobierno gallego la reciente transferencia de las competencias sobre la gestión del litoral, y ha avanzado que la Xunta iniciará negociaciones para lograr también una gestión compartida de las alertas meteorológicas.
En su intevención, reiteró su demanda de que se rescate la concesión de la AP-9 y se transfiera a Galicia, y ha recordado que sigue pendiente de materializarse el compromiso del Gobierno para cogestionar el Ingreso Mínimo Vital. Rueda subrayó la importancia de mantener una relación fluida con el Ejecutivo central para avanzar en estos retos: "Para lograrlo, se necesita una mínima correspondencia por su parte", advirtió.
Un ojo puesto en la guerra comercial internacional
En paralelo a su reivindicación de más competencias, el presidente gallego anunció la puesta en marcha de un plan de vigilancia económica ante los efectos que pueda tener la creciente tensión internacional. Desde el Instituto Galego de Estatística, ahora adscrito a la Oficina Económica de Presidencia, un equipo específico analiza ya el impacto de lo que Rueda calificó como "una guerra comercial" que podría tener consecuencias negativas para la economía gallega.
"Cualquier paso en falso puede salirnos muy caro", ha advertido, tras presentar algunos datos de exportaciones e importaciones y destacar que la balanza comercial de Galicia es "cada vez mejor". Frente a la posibilidad de encerrarse en una postura proteccionista, Rueda apostó por la apertura: "Debemos reafirmarnos en nuestra orientación exterior. Galicia fue siempre un país con una mirada larga, como balcón al Atlántico, última parada de Europa antes de cruzar el charco hacia América", expresó.
En este nuevo escenario internacional, ha concluido, Galicia "debe responder con prudencia, pero jamás con miedo".