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Receta

El ingrediente secreto que convertirá tu pizza en un plato gourmet

Esta pizza se convertirá rápidamente en una de tus recetas favoritas para sorprender a amigos y familiares

Pizza
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La pizza es una deliciosa obra maestra que ha evolucionado a lo largo de los años, adaptándose a diferentes gustos y preferencias culinarias. Si eres un aventurero gastronómico en busca de sabores innovadores, la pizza con dátiles es una elección audaz y exquisita que promete sorprender a tu paladar.

Ingredientes

Masa de pizza fresca

3 Dátiles

Mozzarella

Queso de cabra

Bacon

Tomate frito

Orégano y aceite de oliva

Instrucciones

Preparación de la base

Comienza creando la base perfecta para tu aventura culinaria. Extiende la masa de pizza fresca en tu superficie de trabajo, creando una base uniforme. Para intensificar el sabor, utiliza tomate frito mezclado con un toque de aceite de oliva, pimienta y orégano como la primera capa de tu pizza. Esta combinación añadirá una rica profundidad de sabor.

El toque de mozzarella

Agrega una generosa cantidad de mozzarella sobre la base de tomate. La mozzarella derretida aportará una textura suave y cremosa que se fundirá armoniosamente con los demás ingredientes.

La tríada perfecta: bacon, queso de cabra y dátiles

Distribuye uniformemente las delicias ahumadas del bacon sobre la mozzarella. Luego, coloca delicadamente medallones de queso de cabra, aportando una capa de sabor distintiva y cremosa. Los dátiles, cortados por la mitad, agregarán un toque de dulzura natural que sorprenderá y complacerá a tu paladar.

Toque final de mozzarella, orégano y aceite

Para asegurarte de que cada bocado sea una experiencia completa, añade un poco más de mozzarella por encima. Espolvorea orégano para realzar los aromas y agrega un chorrito de aceite de oliva Palacio de los Olivos para un acabado brillante y sabroso.

Cocción perfecta

Precalienta tu horno a 210 °C. Desliza tu obra maestra en el horno durante aproximadamente 15 minutos a 200 °C, o hasta que la masa esté dorada y los quesos se hayan derretido y burbujeado.

¡Lista para disfrutar!

Retira tu pizza del horno y maravíllate con la combinación de sabores que has creado. Corta en porciones generosas y sirve caliente. Esta pizza única no solo conquistará tu paladar, sino que también se convertirá en un tema de conversación en tus reuniones culinarias.