Las visitas de la semana pasada del príncipe Harry al Reino Unido por su batalla legal contra el ministerio del Interior de su propio país ha dejado varias imágenes para el recuerdo. El duque de Sussex llegó completamente solo a la sala, una estampa muy representativa de las tensiones y cismas que le separan de su familia. Desde el seno de la Corona no se ve con buenos ojos que litigie contra el Gobierno de la nación cuya jefatura de Estado ostenta su padre, el Rey Carlos III, que estaría "avergonzado", según la prensa inglesa, de los últimos movimientos de su hijo.

Pues más se le van amoratar los coloretes si se acaban cumpliendo las "amenazas veladas" del príncipe Harry de escribir un nuevo libro. Según publica el diario inglés "The Sun", el duque de Sussex ha descubierto nuevos secretos sobre la Casa Real en relación a las supuestas diferencias con las que él y su esposa, Meghan Markle, eran tratados, hechos que no dejarían en muy buen lugar a la institución si vieran la luz.

Los secretos descubiertos por el príncipe Harry

"Hay mucha preocupación de que Harry pueda contarlo todo en un nuevo libro. O incluso seguir el ejemplo de Meghan y hacer un podcast. Ha insinuado que ha descubierto secretos durante las audiencias. Especialmente, sobre el trato hacia él y hacia Meghan, que nos sorprenderían a todos", desvela el confidente.

Por lo visto, el nuevo escrito del príncipe Harry no estaría centrado en su relación con la familia real, sino en su lucha en los tribunales por garantizar su seguridad cuando él o su familia se encuentren en Reino Unido.

Tal y como ha publicado "Daily Mail", a lo largo del proceso el duque de Sussex habría encontrado "evidencias" que demostrarían sucios movimientos por parte de Casa Real en su contra. El duque está seguro de que la eliminación de su servicio de seguridad fue una estrategia para "atraparlo" en la institución tras anunciar el Megxit.

El príncipe Harry ha manifestado en varias ocasiones lo importante que es para él que su seguridad dependa de la policía estatal cuando se encuentre en su país, dejando claro que no se trata de un problema de dinero. Está dispuesto a financiar cada centavo que cueste el despliegue de efectivos para él, puesto que la cuestión se centra en un asunto de logística. Bajo su punto de vista, los cuerpos y fuerzas de seguridad del Estado cuentan con más recursos, formación e información que cualquier equipo privado que él pueda contratar.