Inesperada entrevista

Los hijos de Estefanía de Mónaco se juntan para hablar de su carácter rebelde

Pauline, Louis y Camille han concedido una entrevista en la que ponen el foco en la polémica princesa, así como en su icónica abuela, Grace Kelly

Los hijos de Estefanía de Mónaco, Louise, Pauline y Camille
Los hijos de Estefanía de Mónaco, Louis, Pauline y CamilleGtres

La princesa Estefanía de Mónaco siempre ha sido todo un reclamo para la crónica social. Su carácter indomable ha dado mucho juego en el papel cuché, así como sus apasionados amoríos y su vertiente rebelde que mantenía en jaque a sus padres y al pequeño principado. Pero ahora, a sus 60 años, ha adoptado un papel más discreto y menos protagonista, a sabiendas que a las sombras y alejada de la atención mediática se vive mejor. Al menos sí con menos escándalos a los que tener que hacer frente.

La hermana del príncipe Alberto de Mónaco nunca ha tenido intención de rendirle cuentas a nadie. Hija del príncipe Rainiero II y la actriz Grace Kelly, sabía que su familia era vista como un icono, pero no tanto como un ejemplo a seguir. Eso sería para quienes tienen un papel activo en las tareas de representación de la corona, a la que ella ha hecho poco caso. A lo largo de su frenética vida ha sido cantante, también modelo y diseñadora, y ha seguido siempre los designios de su propio corazón, aunque eso le llevase a estrepitosos batacazos amorosos. También a grandes historias de amor, de las que nacieron sus hijos, que hoy hablan orgullosos de su figura y lo importante que es ella en sus vidas.

Los hijos de Estefanía de Mónaco rompen su silencio

De sus muchos romances, dos son especialmente importantes en la vida de la princesa monegasca. El primero que le marcó de forma irremediable fue el idilio que mantuvo con su guardaespaldas, Daniel Ducruet, con el que tuvo dos de sus hijos: Louis y Pauline. El matrimonio no triunfó y separaron sus caminos, cruzándose en él años más tarde Jean-Raymond Gottlieb, con el que tuvo su tercera hija, Camille Gottlieb. Tres hijos que son su mayor orgullo y que le han tomado el relevo en los medios. Ahora son ellos los más seguidos por los paparazzi, pero también los que conceden entrevistas.

Mientras que la princesa Estefanía de Mónaco disfruta de una vida tranquila alejada del foco mediático, sus tres hijos se han sentado con la revista ‘Vanity Fair France’ para hablar sobre ella. Trataron muchas cuestiones sobre sus respectivas trayectorias e inquietudes, pero quizá lo más jugoso está en cuando centran su atención en su madre. “Tengo la suerte de tener mujeres icónicas en mi familia. Mi madre no solo fue un icono de los 80, sino que también hizo siempre lo que quiso. Disponer de ejemplos así influye en tu vida”, subraya Pauline, que ya tiene 31 años.

También han puesto el foco en otros miembros destacados de su familia, como es el caso de sus abuelos. Para la pequeña del clan, Camille, de 27 años, es un honor entroncar con tan icónico personaje: “Cuando me dijeron que me parecía a mi abuela, para mí, me parecía a mi yaya, no a una famosa celebridad internacionalmente”. Además, se atribuye una responsabilidad marcada por Estefanía: “Mi madre siempre nos decía que es imposible tener la vida que tenemos sin dar las gracias a nuestro abuelo. Tenemos el deber de representar a la familia, tanto en suelo monegasco como a escala internacional”, sentencia Camille, comprometida con el legado de su familia y el poder de su clan.

Ninguno tuvo la suerte de conocerla, pues falleció antes de poder tener a sus nietos en sus brazos. Algo que ha marcado a Louis Ducret, de 32, que de su familia ha rescatado una lección importante y es el hecho de permanecer unidos y, sobre todo, presente: “Quiero ser un padre muy presente, entregado a mi familia”. No quiere caer en el error de darle todo a sus vástagos, pero sin formar con ellos recuerdos imborrables que dibujen su relación real. Lo material pasa a un segundo plano cuando falla el contacto más íntimo y eso es por lo que luchan los hijos de Estefanía de Mónaco al formar sus propias familias.