Entrevista

Cari Lapique, la eterna “socialité” que ahora es “abuelona”

Durante años ha sido considerada referente de la “jet set” marbellí por excelencia, ahora disfruta de su faceta más familiar junto a sus cinco nietos

Cari Lapique prepara un viaje a La India con sus amigas
Cari Lapique prepara un viaje a La India con sus amigaslarazon

Cari Lapique ha sido y es un referente en el mundo social desde la época gloriosa de la Marbella de los años 80 donde el común denominador eran las fiestas diarias y la presencia de grandes personajes internacionales. Unos veranos frívolos, divertidos y a la vez muy familiares. Si de una cosa presume Lapique es de haber vivido con unos padres que le enseñaron lo importante que era la unidad familiar y el trabajo. Desde muy joven supo buscarse la vida laboralmente. Quería tener su propia tienda y para conocer la gestión y la venta se colocó de dependienta en El Corte Inglés de Castellana. Meses después se hizo empresaria y tuvo su propia boutique. Aprendió a vender que dice que es lo que más le gusta y mejor se le da. Lleva dieciocho años con los joyeros Suárez, menos tiempo con Nuba, una agencia de viajes a la carta y su propia inmobiliaria con su marido Carlos Goyanes. Desde hace un tiempo es su hija Carla la que la dirige. La pandemia la tocó muy directamente con la muerte de su cuñado Alfonso Cortina al comienzo del confinamiento. Una tragedia a la que se unía el no poder acompañar a su hermana Miryam en esas circunstancias tan dolorosas. Es una mujer positiva que siempre ve el vaso medio lleno.

«Abuelona»

Tiene cinco nietos a los que adora y le encanta que ahora la referencia sea ser la madre de sus dos hijas influyentes Cari y Carla.

-Durante años era el referente de lo que se llamaba la «jet» de Marbella.

- De «jet» nada de nada porque no teníamos «jet», pero lo pasábamos bomba. Nos divertíamos muchísimo, eran veranos con fiestas todos los días. Éramos jóvenes. Salíamos todas las noches y nos recogíamos a las mil, pero por la mañana nos levantábamos pronto para ir con las niñas a la playa y hacer vida familiar. Teníamos una salud de hierro. Y yo ni gota de alcohol, solo agua.

-¿A quién recuerda de aquellos años?

- A Jaime de Mora, Alfonso Hohenlohe, Lola Flores, los barones Von Pantz, Antonio Arribas, los Choris, Nacho Angulo, Carmen Ordóñez, Lolita… Había varios grupos pero al final acabábamos en los mismos sitios y en las mismas casas en las que se hacían unas cenas espléndidas y unos fiestones impresionantes con orquesta y flamenco porque había gente con mucho dinero.

- Eran muy endogámicos. Incluso en el aspecto amoroso. Se divorciaban y la nueva pareja también era del grupo.

- ¡Qué va! Si la gente no se divorciaba como ahora. No te digo que alguno no tuviera doble vida, pero no se separaban.

-¿Sería posible en estos tiempos hacer ese tipo de vida?

- Hay una juventud ahora muy sana y que se lo pasan fenomenal. La vida de Marbella era solo en verano. Cuando llegaba septiembre volvíamos a nuestra rutina. Te aseguro que trabajábamos mucho.

-Ahora la gente conocida prefiere tener un perfil bajo y no participar de esas fiestas públicas.

- Había unas galas benéficas y lo demás solía ser en las casas. Y la prensa también participaba porque, salvo excepciones, eran encantadores y no había ese ensañamiento que hay ahora con los personajes. Los periodistas se lo pasaban igual de bien que nosotros. Se hacían fotos durante un tiempo y luego se guardaban las cámaras. Ha cambiado todo, pero creo que mis padres y mis abuelos pensarían lo mismo de nosotros. También han influido las redes sociales, la gente no quiere significarse.

-De muy joven fue dependienta de El Corte Inglés y después tuvo una tienda de ropa.

- Yo quería tener una boutique y mi padre me dijo que me ayudaba, pero que antes debía aprender y ver lo que era de verdad llevar un negocio y lo sacrificado que era. Estuve trabajando de vendedora y la verdad es que lo hacía muy bien. Mi padre era un hombre especial y siempre me dio muy buenos consejos. Estaba orgulloso de que me gustara trabajar.

-Ahora lo sigue haciendo: Tiene una inmobiliaria, trabaja en Suárez, Aristocrazy, en la agencia de viajes a la carta Nuba...

- En las tres el fin es vender. Vender joyas, propiedades, viajes... y es lo que hago, y la verdad es que lo hago muy bien

-Sus hijas también se han buscado la vida.

- Trabajan como fieras. Carla empezó ayudándonos en la inmobiliaria y hoy en día es la directora. Y Cari lo mismo con su catering. Recuerdo el día que nos dijo que dejaba el despacho donde trabajaba y que se iba a dedicar a cocinar, que era lo que la hacía feliz. Me quedé muerta. Tenía su carrera de Derecho, sus dos master y lo dejaba todo. Y la verdad es que le ha ido muy bien y en el confinamiento se reinventó con la comida a domicilio.

- Lleva 46 años casada con Carlos Goyanes, ¿siempre fue todo tan idílico?

- En absoluto y quien diga que lleva estos años de matrimonio y que todo ha sido de color de rosa, miente. Yo estaba loca de amor cuando me casé con Carlos. Nosotros tuvimos nuestras crisis, pero en ningún momento hubo la mínima posibilidad de separación. En la pareja es importante hablar y nosotros lo hacemos. Y no solo cuando había problema. Ahora el problemas es que en las casas cada uno se engancha a la tele, al móvil y se crean vacíos que terminan en divorcio.

- ¿Qué mata la convivencia?

- El aburrimiento y quizá el no mantener cada uno su parcela de independencia. Ahora se es menos paciente.

- Nadie imaginaba la tragedia del Covid. Falleció su cuñado Alfonso Cortina al comienzo de la pandemia.

- Ha sido espantoso. Estaba como un toro y en horas empeoró, y lo siguiente que nos dicen es que ha muerto. Un horror lo que hemos vivido muchas familias sin poder acompañarlos en los hospitales, ni poder compartir el luto, ni estar juntos.

-¿Laboralmente cómo le ha afectado?

- Mucho, estuvimos en las empresas en ERTE.

- Es la gran «abuelona», como le llaman sus nietos.

- Es lo que más me gusta, disfruto estando con ellos.

-¿Ve los realitys?

- Veo poca televisión. Me encanta leer y este invierno vi un par de series, pero no soy muy televisiva. Conozco los líos de la gente de antes porque veo las revistas. Con el tema de Rocío Carrasco me da una pena tremenda. De ella, de sus hijos y lo que habría sufrido su madre con todo esto.

- Isabel Preysler no deja de sorprender. Todas sus relaciones amorosas fueron un bombazo. Y la guinda ha sido Mario Vargas Llosa.

-Imagino que lo conoces

-¿Tus padres tuvieron relación con Don Juan Carlos?.

- Con él menos, sobre todo con don Juan, con el conde de Barcelona.

-¿Debería volver a España el Rey Emérito?

- Me encantaría y que se solucionara cuanto antes sus problemas porque ha hecho grandes cosas por España.