Sara Verdasco y Juan Carmona dan la bienvenida a su tercera hija: un nombre con historia familiar

La felicidad no puede ser mayor en casa de Sara Verdasco y Juan Carmona. Justo una semana antes de celebrar su noveno aniversario de boda, la pareja ha dado la bienvenida a su tercera hija, a la que han llamado Sara, como su madre. Un nombre con significado especial que refuerza la historia familiar y marca el inicio de una nueva etapa como familia numerosa.

"Bienvenida, Sara. No sabes las ganas que teníamos de conocerte y tenerte con nosotros. Te amamos", escribía emocionada la empresaria en sus redes sociales, acompañando sus palabras con una tierna imagen de la recién nacida descansando en una cuna rosa y rodeada por sus hermanas mayores, Carmen y Valentina, que están a punto de cumplir cinco años. Las pequeñas, ilusionadas desde que supieron que venía en camino una nueva compañera de juegos, no han tardado en mostrar su lado más protector con la nueva integrante de la familia.

Sara, que compagina su faceta de madre con la gestión del restaurante familiar "La Rayúa", ha confesado en más de una ocasión lo importante que es para ella tener una familia grande, como la suya. Sus hermanos Fernando Verdasco y Ana Boyer son pilares fundamentales en su vida, y los lazos entre primos son cada vez más estrechos. En abril, Fernando y Ana también agrandaron su familia con el nacimiento de Martín, su tercer hijo. "Los primos se adoran, se quieren muchísimo. Están superunidos", contaba la empresaria hace apenas unas semanas.

Además, otra prima muy cercana, Laura, también dio a luz esta primavera. Sin duda, los más pequeños de la familia Verdasco-Boyer están destinados a crecer juntos, rodeados de afecto y juegos compartidos.

El próximo 10 de junio, Sara y Juan celebrarán por primera vez su aniversario como padres de tres. Su boda, en 2016, reunió a la familia Flores y a otros rostros conocidos en Boadilla del Monte, y fue una celebración inolvidable. Hoy, nueve años después, la vida les ha regalado un motivo aún más especial para brindar: la llegada de su pequeña Sara, una "princesa" -como su propio nombre hebreo indica- que ya ha conquistado a todos en casa.