«Tic tac» final

La vida empieza por ser una promesa y acaba por ser «un sueño hipotecado que nunca consigues que te pertenezca del todo», dirá uno de los personajes de Guillermo Busutil en «El cumpleaños de Oliver Gide» una de las historias de «Vidas prometidas». Relatos escritos con sensibilidad y con una lucidez iluminada por una conmiseración por los personajes, como si éstos estuvieran bajo un foco tan cruel como caritativo. Una maestra que no ha hecho el bien durante toda su vida tiene un accidente y se ve inválida atrapada en una casa sin ascensor, abandonada. De pronto, como en esos cumpleaños tristes donde la luz se apaga y, al encenderla, vemos a todos cantando a nuestro alrededor, así será el final de «La señorita Margot». Un viejo periodista se ve arrinconado. Todos esperan que se vaya ante el ambiente hostil. En este caso también surge una circunstancia que le dará la vuelta a su vida: es el relato «On the Air». En los textos de Busutil se observan su amor por los personajes y su pasión por la literatura; de hecho «La siesta de Odiseo» es un hermoso texto sobre cómo un abuelo enseña a amar los libros a su nieto. Busutil, narrador, periodista, organizador cultural y director de la revista «Mercurio» de la Fundación José Manuel Lara, ha publicado varios libros de relatos y en todos enseña que uno tiene que ser como una bomba de relojería: sólo tenemos que oír el «tic tac» al final.

«Vidas prometidas»
Guillermo Busutil
Tropo editores
185 páginas. 17 euros.