Barcelona

Hallan un gen causante de la resistencia a la terapia del cáncer de mama más agresivo

Investigadores del Vall d'Hebron Instituto de Oncología (VHIO) de Barcelona, liderados por el oncólogo Josep Baselga, han hallado un gen responsable de la resistencia al tratamiento del cáncer de mama más agresivo, el HER2 positivo, ha explicado a Europa Press el coautor primero del trabajo, Maurizio Scaltriti, cuyo trabajo publica en la revista 'Proceedings of National Academy of Science'.

El tratamiento convencional para este cáncer, el 'trastuzumab', se revela poco efectivo en una tercera parte de las pacientes con este subtipo de tumor, ya que su supervivencia libre de enfermedad se reduce a la mitad, y pasa de los 15 meses convencionales para la mayoría de mujeres a siete y medio en las mujeres con el HER2 positivo.

Ahora el grupo de investigadores del VHIO, junto a otros científicos del Massachusetts General Hospital Cancer Center de Boston --que han participado en la fase final--, han demostrado la relación entre la sobreepresión de un gen --el ciclina E-- con la resistencia a los fármacos contra este subtipo de cáncer.

Scaltriti ha resaltado la especial trascendencia del hallazgo, puesto que hasta un 20 por ciento de las mujeres con tumor en la mama padecen esta agresiva variante, y de éstas un tercio consiguen esta menor eficacia.

Además, los resultados de este estudio podrían traducirse en un tratamiento mejorado capaz de evitar esta resistencia, ha resaltado Scaltriti, que ha explicado que este fármaco se ha probado con éxito 'in vitro' y en animales, y la voluntad del centro es ensayarlo con 250 pacientes de entrada.

De conseguir resultados positivos, se empezará un ensayo clínico a mayor escala del "tratamiento potencialmente inhibidor"de la actividad de la citada enzima para mejorar el pronóstico de la enfermedad, indica el investigador, que ha trabajado con Pieter Eichhorn, también coautor primero del trabajo.

Varios factores han mejorado las cifras de supervivencia del cáncer de mama durante la última década: su detección precoz, un seguimiento más exhaustivo de las pacientes y, sobre todo, la tipificación del tumor en tres grandes subtipos según patrones moleculares --receptores hormonales positivos, HER2 o ausencia de ambos--.

Esta clasificación en los diferentes subtipos ha permitido el desarrollo clínico de tratamientos específicos y más eficaces para cada uno de ellos.

A pesar de este gran avance, todavía existen pacientes que no responden de la forma esperada o bien dejan de responder.