Una semana para alcanzar un pacto

Teodoro Piñuela, portavoz de UGT en Metro de Madrid, aseguró ayer a Efe que la dirección de la compañía ha establecido de forma «unilateral» los pluses que se añadirán a los salarios de los empleados que trabajen durante la JMJ y, por esto, se han visto «obligados» a organizar unos paros que, de extenderse a otros departamentos de la empresa del suburbano, podría repetir las importantes molestias a los viajeros que ya se produjeron el verano pasado, incrementadas, eso sí, por un millón y medio de personas más –la cifra de peregrinos que se prevé lleguen a Madrid con el Papa–.

Días clave
Por si esta convocatoria no fuera suficiente, también se ha sumado a los paros otro sindicato, Solidaridad Obrera, que representa al diez por ciento de trabajadores del suburbano madrileño y que prevé hacer paros el próximo día 18 de 3 a 5 de madrugada, de 11:30 a 13:30 horas y de 18:30 a 20:30.

Pero los empleados de Metro no serán los únicos responsables de paralizar el transporte en la capital ya que, el pasado 5 de agosto, los sindicatos UGT, CC OO y USO anunciaron otra convocatoria de huelga. Los empleados de asistencia en tierra de Barajas, junto a los de todos los aeropuertos españoles –60.000 trabajadores en total– están llamados a realizar una huelga de 24 horas los días 18 y 26 para reivindicar «incumplimientos en el convenio».

Asistencia de aviones, gestión de equipajes, facturación... Los sindicatos aseguran que estos paros se deben al «reiterado incumplimiento del Convenio del Sector de Handling por parte de la empresa WFS (encargada de carga en los aeropuertos de Madrid y Barcelona) y otros operadores».

Huelga en el Metro, en Barajas... la cita papal se ha convertido en una fecha muy jugosa para los representantes de trabajadores en las empresas más cercanas a los ciudadanos que aprovechan la JMJ para hacer más presión sobre sus reivindicaciones con unas convocatorias que amenazan con poner en grave riesgo el dispositivo de transportes organizado con motivo de la visita de Benedicto XVI a Madrid.

Desde el Ejecutivo de la Comunidad de Madrid la consejera de Presidencia y Justicia, Regina Plañiol, ya ha pedido a los trabajadores de Metro que «recapaciten». Tienen una semana para llegar a un acuerdo y de momento esperan la llegada de la solicitud oficial para realizar la huelga para decretar los servicios mínimos en unos días en que la previsión inicial era que el transporte público de Madrid se reforzara para agilizar los desplazamientos de los peregrinos que acudan a la visita del Papa. El ministerio de Fomento es, en el caso de los aeropuertos, la administración que deberá trabajar en contra del tiempo para evitar en todo lo posible las molestias a los alrededor de 1,5 millones de peregrinos que está previsto visiten Madrid la próxima semana.
Benedicto XVI aterrizará en Madrid el próximo día 18. Para entonces Madrid puede estar bloqueada bajo y sobre tierra, todo depende de las decisiones que tomen los sindicatos.