Filosofía

Qué voy a hacer hoy por Fernando Chornet

La Razón
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Hay una frase del empresario Steve Jobs que me ha hecho reflexionar y que voy a citar, «Si hoy fuese el último día de mi vida, ¿querría hacer lo que voy a hacer hoy? si la respuesta fuese ‘no' durante demasiados días consecutivos, sabría que necesito cambiar algo». Plantearte cómo es tu vida, cómo habías soñado que fuese, y pensar cómo te gustaría vivir a partir de hoy, es un ejercicio de reflexión muy habitual en coaching. Hay que marcarse un objetivo y tratar de alcanzarlo creando metas intermedias, que motiven y den ánimos para levantarse cada mañana. La primera pregunta para iniciar este proceso es «¿Qué voy a hacer hoy?».

Rigoberta Menchú afirmaba que este mundo no va a cambiar a menos que estemos dispuestos a cambiar nosotros mismos. La crisis es una losa que afecta al estado anímico. Esta corriente de hastío es devastadora para la creatividad y eso es fatal para las empresas. Si al plantearte qué vas a hacer hoy te fijas un objetivo que te desafíe, que te empuje a dar un poco más de lo que diste el día anterior, aumentará tu productividad lo que redundará en beneficio de tu empresa y poco a poco cambiaremos el mundo.

Esto ha de hacerse lo antes posible para escapar de esa corriente de pesimismo, ya que como reza el viejo proverbio chino, no hay que esperar a tener sed para comenzar a cavar un pozo. Hay que trabajar cada día para hacer las cosas un poco mejor sin temor a equivocarse ya que, recordando a Winston Churchill, el éxito es aprender a ir de fracaso en fracaso sin desesperarse.

Concluyendo: el mundo no cambiará si no comenzamos a trabajar para ello, esforzándonos en dar un poco más cada día. No esperar a que lleguen los problemas para tratar de resolverlos, ser proactivos proporcionará grandes resultados. No hemos de temer al fracaso si somos capaces de aprender de él. Si reflexionamos qué hemos hecho mal o qué no hemos tenido en cuenta, aprenderemos cómo hemos de reaccionar cuando nos encontremos en una situación similar. No hay que temer al fracaso, el hombre valiente es el que vence su miedo y es más importante levantarse que no hacer nada por miedo a caer. Pero, para que todo esto sea posible, hemos de comenzar haciéndonos una simple pregunta «¿Qué voy a hacer hoy?».