El Gobierno ve en Bildu un «vehículo» electoral de ETA

Éstas son las principales conclusiones de ambos recursos:

- Operación dirigida por ETA. La Abogacía del Estado mantiene que la coalición entre EA, Alternatiba y Batasuna era el «plan B» de ETA para concurrir a los comicios del 22-M, una «operación dirigida y diseñada por el complejo ETA/Batasuna» como un «vehículo» electoral para mantener su presencia en las instituciones.

- 1.014 candidatos «contaminados». Un informe de la Policía del pasado día 21 concluye que de los 3.495 candidatos de la coalición, 1.014 presentan «vinculaciones» con partidos ilegalizados. Principalmente se trata de personas que avalaron o respaldaron con su firma la presentación de candidaturas anuladas por la Justicia.

- La legalidad de EA, a salvo. Los Servicios Jurídicos del Estado afirman que el «proceso de convergencia» de EA con la izquierda abertzale en materia electoral arranca al menos desde 2008, pero su alianza, como la de Alternatiba, «no alcanza la intensidad necesaria» para comprometer su legalidad. De hecho, sus candidaturas separadas de Bildu en otros municipios no se han impugnado.

- «Independientes» batasunos. La proporción de independientes en las listas de Bildu, argumenta la Abogacía, «guarda estricta relación con el peso específico de Batasuna en las últimas elecciones municipales» (tomando como referente los votos de ANV y el porcentaje de abstención en donde la formación posteriormente ilegalizada no pudo presentarse). «Ocupan el puesto que a Batasuna le corresponde», subraya, hasta el punto de que EA y Alternatiba «aparecen manifiestamente marginados» de los puestos clave en la «inmensa mayoría» de los supuestos.

- Más candidatos que votos. La obligación de incorporar a los candidatos batasunos lleva a Bildu a situaciones muy sintomáticas. Por ejemplo, la coalición ha presentado candidaturas en circunscripciones en las que EA y Ezker Batua (partido del que se escindió Alternatiba) no obtuvieron ningún voto en las elecciones de 2007 y menos de diez en las autonómicas de 2009. La paradoja es que el número de candidatos que ahora presenta «es superior al de los votantes que tuvieron».

- Rechazo «cosmético» de ETA. La coalición, subraya, ha recurrido a las habituales perífrasis de la izquierda abertzale para referirse al terrorismo de ETA. En definitiva, su rechazo del terrorismo, como el de Sortu en su día, es «cosmético, retórico e instrumental» al contraponer a los atentados de la banda «las detenciones de personas cargadas de explosivos» o supuestas torturas.

- «Cumplimiento milimétrico» de las órdenes batasunas. El recurso del Gobierno incide en que el aspecto fundamental en que se basa la impugnación es que a ETA/Batasuna le corresponde el «diseño, organización y configuración» de la operación. Este hecho, añade, resta relevancia a la composición «de ésta o aquella candidatura», en cuya composición se constata, no obstante, un «milimétrico cumplimiento de lo impuesto por Batasuna».

- «Presiones» a candidatos limpios. De las numerosas reuniones y conversaciones telefónicas en las que se decidieron las candidaturas, la Policía deduce que dirigentes de Batasuna de primer nivel tomaron las riendas en la conformación de las listas. En Elorrio (Vizcaya), la formación ilegalizada buscó personas «no excesivamente significadas» para componer la candidatura, recurriendo incluso a «intensas presiones» personales en algunos casos.

- «En vez de Sortu es una coalición con EA». En una de las conversaciones grabadas por la Policía, un candidato de Bildu tranquiliza a su interlocutora: «En vez de Sortu es una coalición con EA». Y añade tras incluir a Alternatiba: «...es para que algo sea legal».

- Otegi: «Los nuestros». En otra conversación grabada el pasado 2 de abril, en este caso entre Arnaldo Otegi y su mujer, el ex portavoz de Batasuna se refiere a Bildu como «los nuestros».

- EA, marginada en Urdiain. De otra de las conversaciones intervenidas, la Abogacía del Estado resalta que en el municipio navarro de Urdiain, EA queda «totalmente marginada» en la elaboración de la lista, hasta el punto de no contar ni siquiera con el alcalde del municipio.

- Movilización silenciosa. La Guardia Civil señala en su informe 28/2011 que Bildu presenta a estas elecciones 254 candidaturas, una cifra casi idéntica a las 258 que en 2007 formalizó ANV. De hecho, presenta entre 50 y 70 más de las que sus dos partidos ahora coaligados sumaban en las municipales de 2007. Semejante potencia organizativa y capacidad de movilización en silencio y en muy poco tiempo, observa la Abogacía del Estado, «no puede significar otra cosa» que el complejo ETA/Batasuna está detrás de la fraudulenta operación electoral.

- 90 listas con el 20% de candidatos «contaminados». El mismo informe de la Guardia Civil concluye que 90 candidaturas de Bildu tienen más del 20 por ciento de candidatos vinculados a formaciones ilegalizadas.

- Dejarle sin copia del censo electoral. La Abogacía del Estado reclama que no se entregue a Bildu una copia del censo electoral, «instrumento de localización de personas utilizado en numerosas ocasiones para atentar, amedrentar o coaccionar» por la organización terrorista.