Nueva York

La provocación de una secta de Florida incendia el islam

El clérigo Terry Jones ha creado una polémica nacional en EE UU después de anunciar que en el aniversario del 11-S se dedicará a quemar copias del Corán como símbolo de protesta. Las reaccionesen contra no se han hecho esperar, como la del jefe de las tropas de Estados Unidos en Afganistán, el general David Petraeus, que advierte que "podría causar problemas significativos"para las fuerzas estadounidenses.

Imagen de archivo
Imagen de archivolarazon

Cuando el pastor evangélico Terry Jones, de 58 años, ex gerente de hotel, puso el año pasado un cartel en su iglesia que rezaba «El islam es el demonio», fue ignorado.
En cambio, este año con su propuesta de proclamar el 11 de septiembre «Día internacional de la quema del Corán», Jones ha conseguido llamar la atención no sólo de los estadounidenses en masa, sino también la del secretario general de la OTAN, Anders Fogh Rasmussen, y los musulmanes del resto de la comunidad internacional.

El secretario general de la Alianza tenía previsto una reunión con el presidente norteamericano, Barack Obama, en la Casa Blanca para despachar la situación en Afganistán, pero, a la entrada de su entrevista, no pudo evitar la controversia que recorre estos días el país a medida que se acerca el noveno aniversario del atentado contra las Torres Gemelas. Tras las preguntas de los periodistas, indicó que «condeno de forma contundente (los planes de quemar copias del Corán en conmemoración del 11 de septiembre)». «Creo que estas acciones contradicen todos los valores que defendemos y por los que luchamos», destacó el alto mando militar quien también escribió una nota de desaprobación en «Twiter».

El pastor del pequeño pueblo de Gainesville en Florida, de 125.000 habitantes, ha querido avivar la crispación que reina en Estados Unidos desde este verano, a raíz de la controversia sobre la construcción de la mezquita de la Zona Cero en Nueva York; el relanzamiento del «Tea Party» –el ala más conservadora en Estados Unidos– y la desesperación de los ciudadanos por la recesión económica y el paro desmesurado.

Horas antes de la cita de Rasmussen en Washington, el comandante en jefe de las tropas estadounidenses y de la OTAN –con la misión ISAF– en Afganistán, el general David Petraeus advirtió sobre las terribles consecuencias del llamamiento de Jones para quemar ejemplares del Corán el día 11, después de que se hubieran registrado violentas manifestaciones en contra de Estados Unidos en Kabul.

Petraeus apuntó en un comunicado que «pondrían en peligro a las tropas y las operaciones en Afganistán. Éste es el tipo de acciones que los talibán utilizan y podrían causar graves problemas. No sólo aquí (por Afganistán), sino en cualquier punto en el que tengamos contacto con la comunidad islámica», indicó el general. A su juicio, las imágenes de la quema de coranes serán utilizadas por «los extremistas para incendiar la opinión pública e incitar a la violencia (contra Estados Unidos)».

Diferentes imanes en distintos países, cuya mayoría es creencia musulmana, como Egipto o Indonesia, han expresado sus condenas contra Jones y su centro, Dove World Outreach. En cambio, desde Florida el pastor evangélico explica que «la iglesia continúa siendo ignorante sobre uno de los mayores éxitos de satán, el islam». Ayer, recordó que «tenemos que echar la culpa a quien se la merece (en clara referencia a los musulmanes). Ya hemos tomado la decisión (de quemar coranes), aunque la sopesaremos», recordó tras la advertencia de Petraeus.

Mientras, defendió que «amamos, como Dios lo hace, a la gente, pero queremos que las personas conozcan la verdad» en referencia a las intenciones que a su juicio incluye el Corán. La Asociación Nacional de Evangélicos de Estados Unidos ha querido alejarse de las ideas de Jones, y ha hecho pública su solicitud de que cancele el acto de la quema de estos libros. A pesar de la polémica suscitada, Jones no tiene la autorización para convocar una quema de libros este sábado. Aunque, todo indica que va a seguir adelante con sus planes.

Ayer, desde Washington, líderes de distintos credos hicieron una llamada al diálogo y la convivencia interreligiosa entre sus fieles. También aprovecharon para recordar uno de los pilares fundacionales de Estados Unidos: la libertad religiosa.


La fractura de la mezquita de Nueva York

¿Es la Zona Cero el lugar más apropiado para una mezquita? Lo cierto es que el proyecto de la Iniciativa Córdoba, que se encuentra a dos manzanas de donde se levantaban las Torres Gemelas, es un centro comunitario. El plan incluye un auditorio, una piscina, un restaurante, una librería y, por su puesto, también una mezquita. Muchos familiares de las víctimas del 11-S consideran este centro «un gran insulto a la memoria de los que murieron en estos atentados». Pero, también este proyecto tiene un gran apoyo por parte de la clase política, como el del alcalde Michael Bloomberg. Este judío, hombre de negocios, ha apelado a los derechos de la Constitución del país en su defensa de esta iniciativa.