Detenidos 13 narcos que tenían una amplia infraestructura en Madrid y Málaga

El cabecilla de la red, de nacionalidad marroquí, mantenía contactos con proveedores marroquíes, turcos, colombianos o albano-kosovares, entre otros, para aprovisionarse de distintas clases de drogas que posteriormente suministraba a clientes de escalones inferiores, según informa la Dirección General de la Policía y la Guardia Civil.

En total se han realizado dos detenciones en Irún, nueve en Madrid, una en Fuengirola y otra en Valdepeñas.

Los agentes han decomisado casi 47 kilos de hachís, tres de heroína, dos de ketamina, casi otros dos de MDMA cristalizado y otros tantos de cocaína, pero además han intervenido más de 100.000 euros en efectivo, que se encontraban ocultos en el vehículo del líder empaquetado con film transparente de cocina.

La red adoptaba grandes medidas de seguridad y así cambiaba periódicamente de residencias, contaba con inmuebles de seguridad y con vehículos que habilitaba para el transporte de drogas, realizaba contravigilancias y sustituía de forma periódica sus móviles, unas circunstancias que la hacía prácticamente impenetrable.

Los agentes que perseguían a los miembros de este grupo consiguieron averiguar que habían establecido un contacto con un proveedor de heroína ubicado en Holanda y que estaban realizando gestiones para enviar una "mula"a ese país con el fin de introducir en España una cantidad de droga y adulterantes.

Los investigadores desplegaron entonces un dispositivo especial en los puestos fronterizos de Irún y La Junquera y consiguieron interceptar el vehículo en el peaje del primer punto a finales de febrero.

En su interior se encontraban un hombre y una mujer de origen marroquí, que fueron detenidos, pero además debajo de los asientos delanteros había seis paquetes con más de tres kilos de heroína, dos de ketamina, cinco de sustancias de corte y más de 19.200 euros.

También los agentes pudieron dar con un piso de seguridad de la red en la urbanización El Álamo de Madrid y con otros en la localidad malagueña de Fuengirola.

En el primero de ellos se detuvo al líder de la organización cuando iba a conducir su vehículo, en el que escondía casi dos kilos de cocaína, una máquina de contar dinero, una prensa, moldes metálicos, básculas, sustancias de corte y 64.650 euros en metálico distribuidos en varios paquetes envueltos con film transparente.

Poco después, los agentes detuvieron a otro miembro de la red cuando salía de este domicilio de Madrid y que ofreció una gran resistencia, lo que hizo que varios policías tuvieran que recibir asistencia médica por las lesiones sufridas.

Dentro del piso, los arrestados encontraron 1.800 gramos de MDMA cristalizado, 2.800 gramos de hachís y 12.820 euros.

Las pesquisas policiales llevaron a los agentes a interceptar otro envío de la organización previsto en esas mismas fechas. Los traficantes iban a trasladar una cantidad indeterminada de hachís desde uno de los pisos de seguridad de Fuengirola a Madrid.

Los agentes localizaron un vehículo de la red cuando circulaba por la A-4: su conductor fue detenido y se intervinieron 40 kilos de hachís ocultos en el habitáculo de la rueda de repuesto.

En las tres viviendas de Fuengirola, localidad donde fue detenido otro de los arrestados que se dedicaba a traer droga de Marruecos, se localizaron 14 kilos de hachís y otros 10.000 euros.

Uno de los últimos detenidos, en el barrio madrileño de Vallecas, era el destinatario de la droga intervenida en Irún y estaba relacionado con un grupo de etnia gitana vinculado al tráfico de drogas en Madrid.