El Nobel Tranströmer homenajeado en Madrid

El poeta sueco Tomas Tranströmer, Premio Nobel de Literatura en 2011, fue homenajeado ayer con un acto poético en el Círculo de Bellas Artes por un grupo de poetas españoles encabezados por Mario Vargas Llosa, su antecesor en el premio y Cecilia Julin, embajadora de Suecia en España. José Manuel Caballero Bonald, Juan Antonio González Iglesias, Jordi Doce, Esther Ramón, Carlos Pardo, Martín López-Vega y Juan Marqués leyeron poemas suyos en español y Monica Tranströmer, esposa de homenajeado, lo hizo en sueco. Una manera de celebrar la palabra de un poeta que, por desgracia, está incapacitado para hacerlo de viva voz. Hace ahora un año, la Academia sueca hacía público el fallo que premiaba a un poeta sueco, dando a conocer así una faceta literaria menos conocida que la novela del género negro en este país. Un año después, es homenajeado en Madrid a instancia, entre otros organismos, de la Cátedra Vargas Llosa. Aunque el encuentro ha sido trastocado por la imposibilidad de éste de llegar a tiempo –no se sabe si a causa de la manifestación que ocupaba el centro de Madrid–, ha estado cargado de emotividad y afecto desde el primer momento. Con una sala llena de admiradores del poeta y en un clima cálido, se respiraba, según Cecilia Julin, «ganas de hacer de esta velada poética una noche mágica». La embajadora ha introducido a su compatriota manifestando «su orgullo por estar en Madrid realizando un gran esfuerzo dada su situación física». Ha dicho también «que, a pesar del prestigio de los premios Nobel, muchas veces son cuestionados y decepcionan, sobre todo si se dan a poetas que son desconocidos. Pero éste no el caso de Vargas Llosa y de Tomas Tranströmer, conocidos y traducidos en todo el mundo y con una legión de seguidores esperando que se le concediese este premio». Sentado en todo momento en su silla de ruedas, ha recibido el cariño y admiración de los poetas asistentes, que le han mostrado gran cariño y admiración antes de leer sus poemas. Y como intérprete de piano y gran aficionado a la música, la culminación ha sido un recital de piezas para piano a cargo de Lola Barroso.