La agonía de Miss España al descubierto

MADRID- El reportaje publicado en LA RAZÓN DEL SÁBADO sobre la situación de quiebra del certamen de Miss España se convirtió ayer en «trending topic» global a lo largo de la mañana en Twitter. La polémica generada fue tal que la organización de reabrió repentinamente su página web, que hasta ayer se encontraba inactiva. Ahora, muestra una imagen de los actuales representantes de la belleza nacional y pide disculpas por no ofrecer mayores contenidos bajo la justificación de estar realizando cambios. Asimismo, en su página oficial de Facebook, sus seguidores mostraban su desconcierto desde el pasado mes de febrero ante la desactivación de la web, los foros e incluso el no funcionamiento de los principales teléfonos de contacto de la empresa.

Sin embargo, a media tarde de ayer, la organización del Certamen Miss España S.L quiso puntualizar la información recogida por este diario con un comunicado público. Sus propietarios niegan que hayan cerrado o tengan previsto el cierre. Explican también que la actividad profesional de la actual Miss España, Andrea Huisgen, no ha cesado y que este fin de semana se encuentra en Las Palmas, donde ha ejercido como embajadora del Proyecto de Cooperación Internacional «Iluminando Sonrisas». Sin embargo, en su documento no desmienten las serias dificultades económicas por las que atraviesan ni el intento de vender la marca ante la falta de recursos, como desvelaba LA RAZÓN DEL SÁBADO. Tampoco hacen alusión a la renuncia de Rosa María Fernández, la socia que tenía el cuarenta y cinco por ciento de la empresa y que abandonó el certamen rodeada de numerosas dudas sobre su actitud en los negocios, por despedir al personal antiguo y el cierre de la delegación en Madrid en favor de la sede de la inmobiliaria de Julio Martín en Alicante. Omiten pronunciarse acerca de la incapacidad de asumir el segundo pago de la compra ni sobre su intento de devolver el concurso a su antiguo propietario, quien les mostró su rotundo rechazo. No hablan sobre los posibles compradores del certamen que se habría valorado en un millón más de lo que se pagó. Ni refutan la negativa a que la venta se haga efectiva por parte de Beatriz Martín, actual directora e hija de Julio Martín, de la que el círculo cercano a éste dice que es una mujer con mucha voluntad pero muy inexperta.