ERE

Los altos cargos primero

La Razón
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El mejor síntoma para comprobar que en el PSOE se vive un fin de etapa es observar cómo los altos cargos abandonan el barco. Lo hacen con la habitual desfachatez socialista, que considera el Estado como un botín que debería estar siempre en sus manos. Por eso llevan muy mal la derrota. En las últimas semanas se pueden comprobar los movimientos para encontrar acomodo. ¿Para qué sirven los organismos reguladores y de control? Por lo visto para que Caamaño y Salgado coloquen a sus colaboradores. En el caso del primero, a su propio director de gabinete que será el director de la Agencia de Protección de Datos con un currículum que produce sonrojo. Esta situación bochornosa de asalto a las instituciones conduce, incluso, a que se creen innecesarios organismos para tener más abrevaderos donde alimentarse y pastar tras la derrota electoral. Las elecciones del 22-M comportan un inmenso ERE para los altos cargos y asesores del PSOE, aunque nadie los puede acusar de imprevisión. Muchos se preocuparon por garantizarse el futuro a costa del erario público.