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Isabel San Sebastián: «No me desayuno un niño cada mañana»

Isabel San Sebastián: «No me desayuno un niño cada mañana»
Isabel San Sebastián: «No me desayuno un niño cada mañana»larazon

De «chica Hermida», con quien debutó en Antena 3 como tertuliana política en televisión en 1995, a directora y presentadora de «Alto y claro», el programa del que era tertuliana y que ha abandonado Curri Valenzuela para irse a otra cadena. Desde entonces, Isabel San Sebastián no ha abandonado nunca un medio en el que se estrenó como presentadora de un formato con «El tercer grado», en TVE, espacio de entrevistas que abrió con Ana Botella como invitada. La periodista vasca repetiría con posterioridad con «El primer café», de Antena 3; «El debate», de Telemadrid, y «La noche de...», en Popular TV. Es autora de ocho libros y a lo largo de su carrera ha trabajado para la totalidad de radios generalistas del país.

–¿Ha asimilado ya el dar el salto de tertuliana a directora y presentadora otra vez de un programa?
–Lo hice desde un principio porque no deja de ser una vuelta a mis orígenes, cuando estaba al frente de «El primer café» de Antena 3. Era un espacio muy similar y llegamos a ser líderes de audiencia.

–¿Fueron difíciles las negociaciones?
–Todo lo contrario. Me llamó Agustín de Grado (director de Informativos), me contó que Curri se había ido voluntariamente y que el puesto estaba vacante, y me lo propuso. Me preguntó que si me apetecía y le dije que dónde había que firmar, porque ya sabía que Curri lo había dejado, pues ella misma me lo contó.

–¿Va a llegar como un elefante en una cacharrería?
–No. El equipo va a ser el mismo y los contenidos muy parecidos, lo que dicte la actualidad, que intentaremos contar de una manera alta y clara, con nuestro estilo.

–¿Cuáles son las señas de identidad de su estilo?
–Únicamente calidad, pluralidad, actualidad y, sobre todo, mucho trabajo.

–¿La lista de tertulianos va a variar?
–Ahí sí va a haber cambios, ya que me he quedado con la mitad de los que había. El resto también creo que son gente muy buena, pero cada directora tiene lógicamente sus preferencias.

–¿Qué busca en un tertuliano?
–Sobre todo una buena capacidad de análisis, acceso a las fuentes y buena capacidad de debate. Luego, que sean caras conocidas.

–¿Ha encontrado problemas a la hora de hacer su selección?
–Alguno sí, en la medida en que hay diferentes grupos periodísticos implicados, pero, quitando dos que se habían comprometido con Curri, he conseguido a casi todos los que quería.

–¿El que parezca que casi siempre son las mismas caras en las tertulias habla bien o mal de las nuevas generaciones de periodistas?
–A mí me encantaría probar gente nueva, pero es dificil encontrar a jóvenes que sepan de qué va esto, porque es algo que lleva tiempo de aprendizaje. Como cualquier otra profesión, aquí se aprende con los años, y cuando empiezas no tienes fuentes ni valoras bien. No es tanto opinar sino analizar.

–¿Usted va a seguir opinando de la misma manera o dejará que sean sus invitados los que lo hagan?
–Opinaré, pero no de la misma manera que hasta ahora. De todas formas debo decir que soy incapaz de callarme.

–¿Y cuál es la principal diferencia entre Curri Valenzuela y usted?
–Principalmente que ella es andaluza y yo soy vasca, más seria. De todas formas eso no conlleva que, como dicen algunos, me desayune a un niño cada mañana, porque soy una persona muy feliz y con buen carácter. Por lo demás creo que las dos tenemos un sentido de la información muy agudizado ya que ambas procedemos de la mejor época del periodismo en España.

–¿La mira ya como amiga o como competencia directa?
–Indudablemente ahora vamos a ser competencia directa, pero siempre seremos muy amigas. Lo primero que hice al aceptar fue llamarla y ella me reveló que me había propuesto para el cargo. Vamos a seguir siendo amigas, por mucho que unas veces gane ella y otras yo.

–¿Tiene total libertad de expresión en Telemadrid?
–Por lo que a mí afecta debo decir que sí, ya que como tertuliana y como directora nunca he tenido pegas en ese sentido. En el programa, por ejemplo, van a estar representados todos los medios de comunicación que quieren estar.

–¿Entonces por qué cree que se ataca ahora más a Telemadrid que a la propia TVE?
–Porque hay un nucleo sindical en esta casa cuya única misión es criticar a la dirección y a los directores de algunos programas. «Alto y claro» tiene un 14% de audiencia, uno de los que más tienen, y si fuera un espacio sesgado no creo que tuviera tantos seguidores.

–¿Le va a dar tiempo a probar otras experiencias televisivas?
–De momento sólo tendré tiempo para mis columnas y mis libros. Con mi edad ya no tengo la misma capacidad de trabajo que antes.

–¿Y qué noticia le gustaría comentar en su espacio esta temporada?
–Pues la misma que he querido dar desde hace muchos años, que ETA ha entregado las armas sin condiciones, sin chanchullos de ningún tipo, incondicionalmente. No una tregua como la de la otra vez.