Atletismo / Pistorius: la última barrera

LONDRES - Usain Bolt correrá hoy las series de los 100 metros lisos, debutará en Londres, pero el hombre de la segunda jornada no será él. El jamaicano tiene reservados los focos para mañana. Hoy es el día de Oscar Pistorius. Entre los participantes en la prueba de 400 metros habrá uno que no tiene piernas y que en lugar de ellas lleva dos prótesis de fibra de carbono. Pistorius, campeón paralímpico, cumplirá el sueño de disputar unos Juegos Olímpicos en lo que supondrá el final de una lucha que ha durado seis años y que ha creado controversia. Ya consiguió competir en los Mundiales de Daegu. Ganó una batalla. Su presencia en los Juegos es como ganar la guerra.
 
La historia humana de la pelea de un hombre que luchó por superarse, la de un discapacitado físico que no se rindió en la búsqueda de la normalidad, se mezcla con las dudas sobre si las prótesis que utiliza le dan algún tipo de ventaja. La Federación Internacional de Atletismo se negó a dejarle competir porque consideraba que sus «piernas» eran ayuda tecnológica, que le servía casi como muelles y flotaba en lugar de correr o que tenía menos problemas musculares. Incluso mandaron un estudio al profesor Peter Bruggeman, que lo comparó con otros atletas y concluyó que efectivamente sí le daban ventaja. Esto impidió que Pistorius estuviera en los Juegos de Pekín, pero el surafricano no se rindió y apeló al TAS, que le dio la razón y echó por tierra el estudio de Bruggeman.

Las puertas se abrieron para Pistorius, que ya competía con normalidad en su país, y dio el salto. Primero logró participar en Daegu y hoy lo hará en los Juegos. Hace unos días se salió de nuevo con la suya, ya que aunque le dejaban disputar el relevo, sólo lo podía hacer en la primera posta, y lo que más dificulta sus protésis es la salida. El martes la IAAF también cedió en eso. Su presencia ha dividido al mundo del atletismo. LaShawn Merrit, campeón olímpico de la distancia, está con él: «Le he dicho cuánto respeto le tengo a él y al esfuerzo que ha hecho. Deseaba algo y dio los pasos para estar donde quería». Otros no lo tienen tan claro y ya han dicho que no les parece bien que corra. El mismísimo Michael Johnson, plusmarquista de la distancia, pese a asegurar que es amigo suyo, no quiere que participe.
 
El objetivo personal es meterse en semifinales y conseguir dar un impulso a los Juegos Paralímpicos. El debate se mantiene abierto, pero hoy «Blade Runner» correrá en Londres.