Huelga de estibadores

El Gobierno creará una Comisión para «controlar» el Valle de los Caídos

El primer objetivo del Ejecutivo fue estudiar la «viabilidad» de las exhumaciones en el Valle de los Caídos, para lo que no dudó en llevar a cabo lo que definió como «prospecciones visuales».

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El siguiente paso fue cerrar a los fieles el paso a la basílica, ya que el mal estado de la Piedad de Juan de Ávalos, situada en la entrada, podría provocar desprendimientos, a juicio del Gobierno. Y finalmente, tras verse obligado a renunciar a la reforma de la Ley de Libertad Religiosa, quiso dejar claro que, en virtud de la Ley de Memoria Histórica, en el Valle no pueden llevarse a cabo actos políticos ni que exalten la Guerra Civil o el franquismo.
De nada sirvió el informe de Justicia en el que se determinaba que el mal estado de los cuerpos hace inviable las exhumaciones o que el Valle de los Caídos sea un lugar de culto y un cementerio, su obstinación con este lugar y lo que representa ha llevado al Ejecutivo a crear una Comisión de Expertos para decidir su futuro.
Así lo anunciaba ayer el vicepresidente primero del Gobierno, Alfredo Pérez Rubalcaba, tras la reunión del Consejo de Ministros. La comisión se constituirá el lunes y estará formada por trece personas. Entre sus objetivos figuran el de impedir la celebración de actos como el aniversario del 20-N o exigir que en el propio Valle se explique cómo éste fue construido por prisioneros republicanos. Extremo, este último, rechazado por la Asociación en Defensa del Valle de los Caídos (ADVC), desde la que aseguran tener documentación para «desmontar» esa versión de los hechos.
Tampoco están de acuerdo con el capítulo relativo a las exhumaciones. El Ejecutivo anunció que un equipo de peritos evaluará las demandas particulares, cuando desde Justicia ya se dejó claro que el estado de los cuerpos no lo hace viable. Y ahí se «toparán» con los miembros de la asociación que no dudarán en recurrir a los tribunales para impedir que los restos de sus familiares sean perturbados.
Desde la ADVC temen que con este nuevo «ataque» la libertad de culto corra peligro. Mientras, el abad del Valle de los Caídos, Fray Anselmo Álvarez, señaló que «aún quedan muchas cosas para aclarar» y que no será hasta entonces cuando se manifieste.



Pablo Linares. Pte. Asociación Valle de los Caídos
«Todo viene por el revanchismo del Ejecutivo»
–El Gobierno creará una Comisión de Expertos para decidir el futuro del Valle de los Caídos. ¿Es necesario?
–No. Todo el recinto es un lugar de culto y un cementerio. Así lo establece el artículo 16 de la Ley de Memoria Histórica y todo aquel que lo desvirtúe se encontrará con nosotros en los tribunales.
–¿Dicen que todavía es un lugar controvertido?
–Se equivocan. Ahora es un espacio de reconciliación para todos, excepto para los que no quieren reconciliarse.
–¿A qué atribuye este nuevo golpe contra el Valle?
–Todo viene por los ánimos revanchistas del Ejecutivo. Lo único que pretenden es radicalizar su postura para recuperar el voto de la izquierda.