La ONU pide una investigación por la matanza de civiles en Costa de Marfil

La capital económica de Costa de Marfil, Abiyán, vivió ayer una jornada de relativa tranquilidad tras los cruentos combates entre las tropas del presidente saliente, Laurent Gbagbo, y las llamadas Fuerzas Republicanas de Liberación del mandatario electo, Alassane Ouattara. Sin embargo, la polémica por las denuncias del Comité Internacional de la Cruz Roja sobre la matanza de al menos 800 civiles a manos de las fuerzas de Ouattara en la ciudad de Duekoue, en el este del país, tuvieron eco en la Naciones Unidas que ayer pidió una investigación sobre estas acusaciones. Tanto Ouattara como sus portavoces prometieron averiguar lo sucedido, pero descartaron de plano ser los responsables de la matanza. A la par, tanto las fuerzas militares francesas como la ONU iniciaron la evacuación de su personal y de los civiles que huyen del conflicto hacia los países vecinos.