Fatalidad en las vías de la Línea 1

MADRID- Sucedió en cuestión de segundos. Faltaban sólo diez minutos para el mediodía cuando una mujer de 37 años sufrió un accidente en la estación de Nueva Numancia, en el distrito de Vallecas de Madrid. La joven, que es invidente, se cayó, según testigos presenciales, entre dos coches del tren que estaba parado en la estación. A consecuencia de la caída, la víctima, de nacionalidad cubana, sufrió la amputación de su brazo izquierdo, entre otras heridas, informó un portavoz de Emergencias Madrid.Al parecer, la víctima se desorientó y entró en el hueco que hay entre los vagones, en lo que se conoce técnicamente como acoples de los coches, informó Metro de Madrid. Al parecer, confundió la puerta del vagón con el espacio entre coche y coche y se cayó cuando las puertas del metro ya se habían cerrado sólo segundos antes de que iniciase la marcha. El conductor, que no se percató de lo que había ocurrido, comenzó a mover el convoy y recorrió unos metros antes de detenerse. Teodoro Piñuela, secretario general de UGT en Metro, indicó que la banda «de botones» del andén –la señalización instalada para evitar caídas–, está en «buenas condiciones» y aseguró que la mujer se dejó «guiar por el ruido de la estación, por los viajeros que entraban».La mujer, indicaron fuentes de la compañía madrileña, estaba entrando por la zona central del andén y no por la delantera, que está marcada y delimitada con un borde para que los ciegos lo detecten cuando pasen su bastón. Además esa marca indica a los invidentes el lugar dónde se sitúa la puerta del primer coche para que puedan acceder a él sin ningún tipo de problema. Fueron los viajeros que presenciaron el suceso quienes se encargaron de accionar el freno de emergencia para evitar que la víctima sufriese heridas de mayor importancia. A pesar de esto, para cuando consiguió pararse el tren, ya había arrollado accidentalmente a la mujer. Hasta dos usuarios ayudaron a subir a la chica de las vías al andén. Una vez allí, llegaron los sanitarios del Samur, que comprobaron que había perdido el brazo. La víctima presentaba también traumatismo torácico y, tras ser intubada, fue trasladada al hospital Gregorio Marañón, donde permanece ingresada con pronóstico «muy grave».Los sanitarios también tuvieron que atender al conductor del tren, que lleva trabajando tres años en este puesto. Tuvo que recibir atención psicológica tras conocer el alcance del accidente ya que sufrió una crisis de ansiedad. Como consecuencia del incidente, el servicio en la Línea 1 del metro madrileño estuvo suspendida durante casi una hora entre las estaciones de Pacífico y Portazgo. El servicio se reanudó con normalidad una vez despejada completamente la zona.

Otros casosABRIL DE 2005 / La Policía evita que un hombre tire a otro a la vía en Principe Pío Una agente del Cuerpo Nacional de Policía que estaba fuera de servicio detuvoen la línea 6 de la estación de metro de Príncipe Pío a un hombre que tenía agarrado por el cuello a un viajero de 45 años e intentaba tirarle a la vía mientras varios jóvenes trataban de impedirlo. El inicente sucedió a principios de abril y no hubo que lamentar daños y el agresor fue detenido, que acumulaba 40 arrestos por amenazas y lesiones.

OCTUBRE DE 2005 / Un perturbado tira a las vías a una joven de 20 añosMiriam aguardaba la llegada del convoy de la línea 5, en la estación de Carabanchel, cuando, en un segundo, se vio en medio de la vía. Un joven 23 años con problemas mentales la empujó a la vía sin motivo aparente. Al conductor del Metro no le fue posible reaccionar, y los vagones golpearon sin piedad a Miriam. Como consecuencia del arrollamiento la chica sufrió la amputación de la pierna izquierda a la altura de la pelvis, heridas por desgarro en el pie.